Hoy es el turno del sonido, pocos campos son más importantes para el gamer, no sólo porque una buena calidad es deseable sino, porque: en un mundo de juegos en escenarios abiertos como Battelfield V, Fallout (aunque no ese desastre de Fallout 76) o Far Cry 5, es literalmente, cuestión de vida o muerte saber de dónde vienen los disparos o desde dónde se acerca el peligro.
Es por eso que llegó el turno de hablar de los parlantes G560 y los audífonos G933 Artemis (me encanta ese nombre).
La discreción no es su fuerte. Los parlantes G560: Se ven bien, suenan bien y se sienten bien. Los G560 son un juego de parlantes que casi lograron que me sacaran de mi propio apartamento. Con un pico de 240 Wattsy sonido 7.1, son de un diseño casi minimalista (para lo que pueden lograr).
Los dos parlantes secundarios o satélites pueden llegar a los 97 decibeles e integran un juego de 4 luces RGB por parlante, que pueden ser configuradas como color fijo, variable o como ecualizador del sonido que salga por ellos.
La sensación al tacto es de productos de calidad. Están muy bien diseñados, la tela del frente es del nivel del Amazon Eco o del Homepod de Apple y, el resto de materiales, combinan perfecto presentando acabados brillantes en los arcos y mate en los marcos.
En cuanto al subwoofer “ay Dios mío”! Que potencia. Este, de hecho, apunta hacia el piso, lo que hace que los bajos se sientan intensos y, sin importar el tamaño del cuarto en el que se encuentre, el sonido se siente realmente envolvente (además de ser causa de molestia para los vecinos de abajo).
Hay que aclarar que, además, los parlantes integran Bluetooth 4.1 (por lo que es posible conectarlos a cualquier dispositivo compatible), un puerto micro USB y el tradicional de 3.5 mm para conectar un cable auxiliar.
En términos generales, el sonido es genial, claro en los altos, denso y balanceado en los bajos. Son una muy buena opción para juegos y para escuchar música en general.
Los que la sacan del estadio son los audífonos G933 Artemis: Desde que uno los ve en la caja, sabe que serán una gran experiencia auditiva, sin embargo, a medida que se comienza a usarlos, es posible darse cuenta de todo lo que pueden hacer, de las opciones de personalización y todo el trabajo que hay detrás de este par de audífonos.
¿Por dónde comenzar? Suenan muy bien desde el momento de sacarlos de la caja. ¿Son grandes? sí claro pero, son cómodos, como pocos en el mercado! Con unas muy suaves almohadillas que rodean bien la oreja y no se sienten estrechas o pesadas.
No son bluetooth, usan un adaptador USB. Claro, se pierde un puerto pero, se gana en alcance (en caso de usar una torre gamer que no tenga bluetooth integrado).
Tal como se mencionaba anteriormente: los Artemis son bastante buenos pero, cuando se sincronizan con el Logitech Gaming Software, wow! Toda la experiencia se expande. Para comenzar, sus tiras de luces LED se pueden sincronizar con la luz de la G en el mouse G903, ya sea en modo fijo o dinámico (según sea el caso de uso).
El ecualizador en el software tiene muchas opciones de configuración predeterminadas, y además, integra un modo manual que puede guardarse a modo de perfil personalizado, lo cual, es muy útil, sobre todo, en casos en los que se quiera hacer foco en la música (como en juegos de carreras o en sonidos ambientales en los “shooter”). Los Artemis entonces, pueden ser tan adaptables como el juego que se esté disfrutando.
Ahora bien, algo sorprendente fue el sistema 7.1, sí señores unos audífonos gamer 7.1, que puede ser configurados según sea el caso de uso pero, en general, entregan una sensación ambiental de 360 grados con un alto nivel de realismo. Se lucieron con estos amigos de Logitech.
¿Hay razones para preferir los audífonos G933 Artemis? Por su buen diseño, porque integran tan bien el micrófono, por su mezcla entre innovación y exageración! Por lo anterior, los G903 Artemis, son unos audífonos tanto para el amante de la buena música como de los buenos juegos.
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Andrés Felipe Sánchez
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