Cuando se trata de impresión, la innovación sigue avanzando a grandes pasos. Quizás ya no se trate de la idea de una impresora en cada casa; sino de crear una pieza de tecnología que conozca las necesidades de un negocio o institución y las convierta en prestaciones y requerimientos de diseño.
Hace un tiempo hemos visto como HP trabaja para ofrecer este tipo de soluciones, pensando en los negocios más grandes con las DesingJet, al usuario que busca la conveniencia de la impresora tradicional con sistema de llenado de tinta en las Ink Tank y claro, hasta el usuario final y creativo que busca imprimir en dónde, como y cuanta veces sea (HP Indigo).
Ahora, HP ha presentado otra impresora, la Never Stop, una propuesta que, a falta de una mejor palabra, podemos llamar híbrida, pues se trata de una impresora láser. Pero, además se recarga su tanque con un tóner, de la misma manera que las impresoras de inyección, ¿raro no?.
Digamos que es poco convencional pero, a sí mismo, muy conveniente, ya que combinando ambas tecnologías tenemos algunas claras ventajas:
- Al ser una láser tenemos impresión rápida y de alta calidad en grandes cantidades.
- Al tener un tanque, cargarlo es sencillo y muy rápido. Pasando de un proceso que casi requería personal especializado, a uno en el que a través de una “jeringa” se puede hacer de fácilmente y en 15 segundos.
- La “jeringa” tiene un chip de identificación único que evita que le vendan al usuario copias piratas.
- Hasta 5.000 hojas con gran calidad se puede imprimir de una manera continua.
Por lo demás la Never Stop tiene los estándares de calidad de HP a los que ya estamos acostumbrados y la integración con el HP Smart App que permite que se pueda usar sin problemas desde un Smartphone por ejemplo.
Más que una “impresora de oficina”, la Never Stop, es fiel a su nombre y se convierte en una aliada para los profesionales independientes y Pymes, nunca para porque ellos no pueden darse ese lujo.
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Andrés Felipe Sánchez
