Mark Zuckerberg quiere que WhatsApp e Instagram digan en su nombre que son parte de Facebook. Pero, ¿por qué?
Debo confesar que desde el viernes que leí el artículo de The Information sobre el inminente cambio de nombre de Instagram y WhatsApp para incluir “from Facebook” no podido dejar de pensar en por qué hacerlo ahora y en las implicaciones que puede tener.
Y no es tanto por el hecho de hacerlo sino por el momento escogido para hacerlo.
Si hubiera sido en el 2012 cuando la compañía pagó mil millones de dólares por Instagram, en el 2014 cuando sorprendió al mundo entero con los 22 mil millones que pagó por WhatsApp, lo hubiera entendido.
Si hubiera sido el año pasado cuando se conoció que Zuckerberg había decidido ejercer más control sobre las operaciones diarias de las compañías, lo que llevó a que sus fundadores se retiraran (al parecer no muy contento), lo entiendo.
Es más, si hubiera a comienzo del año cuando Zuck anunció los planes para unificar (o mejor, permitir la conectividad entre) WhatsApp, Facebook Messenger e Instagram Direct, lo entiendo.
Pero, ¿ahora, cuando le acaban de imponer una de las mayores multas de la historia por lo ocurrido con Cambridge Analytica (aunque financieramente hablando no es más que una palmadita en la mano)?
¿Ahora que estamos en medio del debate de si las Big Tech son demasiado grandes y deben ser desmembradas y es precisamente Facebook (y su control total sobre nuestras comunicaciones) lo que lo generó?
¿Ahora luego de que los congresistas norteamericanos quedaron muertos del susto con el anuncio de Libra y quieren detener su desarrollo y lanzamiento a toda costa porque le daría aún más poder a Facebook?
¿Ahora que saldrá el nuevo libro de Edward Snowden en el que, básicamente, acusa a Facebook de espionaje?
¿Ahora que se calienta la campaña electoral en Estados Unidos y en la que todos tienen sus ojos puestos en cómo será utilizado Facebook como un arma dentro de la misma, por parte de actores internos y externos?
No entiendo la lógica del anuncio.
No la entiendo porque a pesar de los escándalos y de los movimientos para cerrar las cuentas de Facebook (que al parecer poco efecto han tenido), Instagram y WhatsApp han pasado de agache. Es más, miles de usuarios se han ido de Facebook para Instagram sin saber que ambas compañías pertenecen a la misma plataforma y que las prácticas de recolección de información son las mismas.
Y no la entiendo porque al hacer más evidente que Instagram y WhatsApp son parte de Facebook la percepción de que Facebook es demasiado grande sólo aumentará.
No creo que sea un paso previo para unificar todas las experiencias en una sola app (su funcionamiento sigue siendo demasiado diferente para hacerlo). Creo más bien que es un tema de ego. Y si es así creo que es un error que le costará caro a Zuckerberg y a su equipo.