Debo confesar que llevo varias semanas tratando de entender la lógica de negocio tras Apple Fitness+, el servicio de entrenamiento virtual lanzado por Apple a finales del 2020 y que está, por ahora, sólo disponible para usuarios del Apple Watch en Australia, Canada, Irlanda, Nueva Zelandia, el Reino Unido y Estados Unidos por USD 9.99 mensuales, USD 79.99 por ano o como parte del paquete Premiere de Apple One.
El valor no está lejos de los USD 12.99 mensuales que cobran servicios como Peloton, o los USD 19 que vale el mes en Cyglo TV.
Y aunque ya llevamos un par de años contando del shift de Apple hacia un modelo de suscripciones y servicios (que se materializaron con el lanzamiento de Apple One) el anuncio de Apple Fitness+, aunque me emocionó, me ha tenido pensativo.
El valor de la Data
Llevo un mes alternando entre Cyglo TV y Apple Fitness+ y probando, en este último, ejercicios que no hago regularmente, como Baile, Core, Hiit y Yoga y he caído en cuenta qué es lo que hace diferente a Fitness+ de los otros servicios disponibles en el mercado y cuál es el valor real del servicio para Apple.
No me malentienda. Si Apple logra 1 millón de sus usuarios se enganchen a Fitness+ facturará otros USD 80 Millones. Pero eso, como dirían los norteamericanos, es maní al lado de los USD 100 Mil Millones que se espera haya facturado la compañía en el trimestre Decembrino (el miércoles les contaré como cerró oficialmente). Si el servicio es tan bueno como se anuncia, de pronto lleva a la venta de más Apple Watch, lo que seguirá dándole gasolina a una de las divisiones que más crece dentro de la compañía, la de Wearables, Hogar y Accesorios.
Sin embargo, el real valor de Fitness+ para Apple no está ahí sino en la data que puede levantar y en cómo con ella puede perfeccionar el Apple Watch y los algoritmos que miden calorías, oxigenación y demás.
Y es que mientras en otros servicios usted puede ver a los profesores y, de pronto, el tiempo transcurrido o restante en la pantalla, Fitness+ le muestra información específica de su ritmo cardíaco, calorías consumidas y cómo se compara su nivel de esfuerzo con el de todas las demás personas que han tomado esa misma clase (esta data es anonimizada).
Piense en cómo se entrena un algoritmo, en la cantidad data que se necesita y en lo difícil que es conseguirla (es por eso que entre 1960 y el 2010 vivimos el Invierno de la Inteligencia Artificial).
Ahora piense en ese mismo millón de usuarios hipotético que pueden usar Fitness+ y en cómo Apple ahora puede mapear los movimientos de cada uno de ellos con un ejercicio específico en cada momento. Piense en la cantidad de data points que puede obtener de cada uno de los más de 500 videos que hay hoy en la plataforma (más lo que se suben cada semana) y en cómo cada uno sirve para perfeccionar el entendimiento que el Apple Watch tiene de lo que significa, caminar, remar, montar en bicicleta, hacer una pose específica de yoga, etc., etc. y de cómo toda esa data sirve para que el algoritmo que usa el Apps Watch para calcular decenas de variables en el día a día se perfecciona con la nueva información.
Ya me han oido hablar y escribir sobre negocios basados en información (Data-driven businesses) y Apple Fitness+ es un buen ejemplo.
Ahora esperemos que llegue oficialmente a América Latina para que más gente lo pueda utilizar.
Nota: Es importante aclarar que la información que Apple pueda levantar es anonimizada y que ningún dato de salud se usa o comparte con nadie. Es más, el grueso del procesamiento de la información del Apple Watch se hace en el dispositivo y ni siquiera se transmite a los servidores de Apple.
