Se lo que están pensando, me pasó lo mismo que a ustedes al escribir el titulo pero, aunque suena idéntico a un lema de la película del señor de los anillos, el contexto es claramente diferente!
Oura (el anillo en cuestión) está muy orientado a controlar el bienestar de los consumidores, de una manera discreta, liviana y consistente para lograr un seguimiento a la medida de cada cual.
Algo interesante es que Oura aprende al recolectar la data especifica del usuario a nivel de temperatura, ritmo cardíaco / respiratorio y otra serie de signos vitales, todo con el fin de generar las alertas del caso cuando alguno de los patrones del usuario se salen “de su propia” normalidad. Por ejemplo, para alguien de la tercera edad o con problemas de salud, la temperatura corporal “normal” puede ser diferente a la de un atleta o un adolescente.
Así las cosas, entre los indicadores que Oura usa para determinar si el usuario está teniendo un buen día, se encuentra la data de: el sueño, la actividad y el estrés corporal, factores que seguramente van a influir en la disposición la energía y hasta el “mood” que se va a tener esa persona en un determinado periodo de tiempo.
Para entender un poco mejor los detalles que saltan a primera vista acerca de Oura, el anillo enfocado en el bienestar de los usuarios, aquí tenemos un vista rápida del mismo.
Cómo pasa con muchos de estos nuevos wearables (y hasta con las pruebas de mapeo del ADN), al mostrar a los doctores la data del dashboard de Oura, algunos indicadores resultan un poco extraños y, por lo mismo, no saben bien como interpretarlos 🤷🏻♂️. Así que no queda otra salida que usar lo que resulta familiar, sobre todo, a nivel de las alertas para ir al médico y hacerse el examen del caso.
