Tal como lo decía Andrés en su artículo de hace unos días, cuando se habla de “selfie” o auto foto, se hace referencia a una fotografía de usted mismo, tomada por usted mismo, sólo o con un grupo de amigos, captada en una situación “casual”. Aunque los “selfies” siempre han existido, su explosión se dio gracias a las cámaras frontales de los dispositivos y a la aparición de herramientas de edición (retoque de imágenes en los móviles). El fenómeno es tan grande que se ha vuelto tendencia en las redes sociales y, por lo mismo, varias compañías han iniciado procesos de “innovación y desarrollo” completos, para lograr la forma de complementar y/o mejorar esta práctica. Tal es el caso de la gente de gosphero.com/ que en el pasado lanzó al mercado un “bola” que puede controlarse a través de SmartPhones con sistema operativo iOS o Android y que, como era de esperarse, trae una cámara que enriquece los momentos de uso. El producto ha interesado a muchos en el mercado ya que la interacción es bastante fluida y puede complementarse por medio de nuevas aplicaciones.
Hasta este punto se trataba sólo de diversión y, posiblemente, la relación del “juguete” mencionado anteriormente y las “selfies” no era muy evidente. Pero, recientemente, dicha compañía decidió “anunciar” una especie de “adminículo” que pretende actuar como ese compañero de toda buena situación casual, que no se queja ni trata de llevarle la contraria en el momento de capturar esos valiosos instantes por medio de una cámara que puede preservarlos “para la posteridad “. La idea parece ser buena, aunque el dispositivo luce como algo sacado de una “película de ciencia ficción de los 90s”, y es difícil predecir su impacto ya que hasta ahora sólo lo han anunciado por medio de videos y de una serie de fotografías.
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Seguramente si el “Selfiebot” fuera una realidad (y no una broma del tipo “April´s fool”) y llegara a cumplir su promesa de venta, más de un adolescente y/o persona joven llegará a adquirirlo para complementar, incidentalmente, sus álbumes en redes sociales usando fotografías “más casuales”, que van más allá de la perspectiva lograda por el alcance del brazo. Así pues, cuando se logre ese tipo de tecnologías, es muy posible que la tendencia de las “selfies” en redes sociales llegue a una perspectiva aún más “narcisista”, en donde el eje de las conversaciones simplemente sea compartir fotos y videos de “uno mismo” en diferentes momentos o facetas de su vida, dándose lugar, entonces, a aquella peregrina afirmación contenida en un comercial de TV, según la cual: “la envidia es mejor despertarla que sentirla”!