Meta, la compañía que antes se llamaba Facebook y que ahora es la dueña de Facebook (la plataforma), Instagram, WhatsApp y Oculus presentó el viernes su primer reporte de resultados bajo esta nueva identidad y fue, por decir lo menos, catastrófico.
La compañía protagonizó la caída más grande de la historia de Silicon Valley borrando cerca de $252.000 millones de dólares de capitalización de mercado en sólo un día.
Debo confesar que me pareció extraño lo sucedido porque (a) ni cuando el tema de Cambridge Analytica ni con lo de los Facebook Papers ni con ninguno de los múltiples escándalos en los que la compañía ha estado inmersa en los últimos años hemos visto efecto alguno (b) en los últimos 2 meses no ha habido mayor movimiento en ese frente y (c) porque la compañía que reportó un crecimiento de 37% en ventas y 35% en utilidades para 2021 y cuya fuente principal de ingresos sigue creciendo, ¿no?
Entonces, ¿el precio de la acción se desplomó porque las expectativas de Wall Street estaban por encima de lo reportado? Ese cuento no se lo come ni el más ingenuo de los inversionistas.
La verdad es Mark Zuckerberg y su equipo están en medio de una “tormenta perfecta” que ha puesto nerviosos a varios inversionistas y que provocó la estampida que llevó a que la acción perdiera 27% luego del reporte de resultados financieros. Una tormenta perfecta que incluye factores internos y exógenos, entre los que se destacan:
1 – Caen los usuarios (que importan)
Por primera vez en 30 trimestres (30!!) la compañía no creció en usuarios sino que presentó su primer decrecimiento: 1 millón menos de Usuarios Diarios Activos (la métrica más importante en el negocio de redes sociales).
Sí, yo sé; 1 de 1930 no es nada. A menos que ese millón de usuarios sean de aquellos que de verdad le important a la compañías. Usuarios en Estados Unidos & Canadá, la región en donde más Ingresos Promedio por Usuario genera la compañía.
Y es que mientras un usuario en Asia o en America Latina le generan a Meta $4.89 o $3.43 dólares por trimestre, un usuario en Estados Unidos y Canadá el usuario promedio le genera cerca de $61 dólares. De ahí la preocupación que sean esos usuarios los que se están “aburriendo” de la plataforma y están dejando de entrar a diario.
2 – La amenaza de TikTok es más real que nunca
Zuckerberg ha sabido por años que TikTok es la principal amenaza de su imperio. Es más, gran parte de su permisividad hacia los políticos republicanos (incluido Trump) luego de las elecciones del 2016 tuvieron que ver, precisamente, con la búsqueda de apoyos en el Congreso y el Senado Norteamericano para frenar el avance de “la red social China” que terminó con el fiasco de la declaración de que TikTok era una “amenaza para la seguridad nacional” de los Estados Unidos de América (esa misma que se cayó por su propio peso).
Sin embargo, no recuerdo que ese miedo lo haya llevado a hablar públicamente de TikTok y menos en una llamada con analistas financieros. Pero eso fue lo que precisamente pasó la semana pasada: una y otra vez Zuckerberg y David Wehner, el CFO de Meta, hablaron de TikTok. TikTok esto, TikTok lo otro, TikTok por aquí y TikTok por allá.
TikTok se le está comiendo comienzo el almuerzo a Facebook y nada de lo que la compañía ha hecho parece estar dando resultados.
3 – No nos digamos mentiras, Facebook ya no es cool
El gran problema de Facebook es que a pesar de ser el cash cow de la compañía Facebook ya no es cool. A los jóvenes no les interesa utilizar la plataforma y prefieren alternativas como TikTok y Snapchat.
Sí, Instagram se supone que es la app para jóvenes de la plataforma pero ¿su ha dado cuenta cuántos de los videos que ve en Instagram terminan con el logo de TikTok?
Facebook terminó siendo una cloaca para la ultraderecha norteamericana (mírese esta cuenta que muestra, a diario, los posts con más engagement en la Estados Unidos en la plataforma) y un mall de “televentas” en los que el grueso de los posts son pura publicidad.
4 – La compañía está en la mira de las autoridades
En el Congreso Norteamericano hay al menos una docena de propuestas de ley que afectan directamente a Meta y a sus diferentes operaciones. El año pasado por lo menos 10 fiscales estatales abrieron una investigación en compra de la compañía por los efectos de Instagram en sus usuarios más jóvenes, luego de las revelaciones de Francis Haugen. La FTC ha sobrepasado ya varias barreras legales en una demanda que busca “desmembrar” a Meta y obligarla a vender o escindir algunas de sus operaciones. Y a comienzos de año los reguladores franceses multaron a Facebook por un total de 60 millones de euros por el uso de cookies.
En el mercado hay consenso de que este año varias de esas investigaciones prosperarán y Facebook tendrá un año complejo.
Eso sin contar la percepción de que los gobiernos anteriores fueron demasiado permisivos con las adquisiciones de Facebook del pasado (por ejemplo Instagram, WhatsApp y Oculus) y hoy le sería imposible a la compañía hacer cualquier adquisición que le ayudara a mantener el ritmo de crecimiento y combatir la competencia que viene de diferentes frentes.
5 – El efecto Apple (y lo que ocurre cuando le permitimos a los usuarios decir “si” o “no” a priori)
A comienzos del año pasado (y luego de varios meses de peleas públicas) Apple introdujo la opción de App Tracking Transparency en iOS 14.5. Hacia final del año 82% de los iPhone y del iPad a nivel mundial habían actualizado al menos a dicha versión y cerca de 65% de esos usuarios utilizaron los pop ups asociados al rastreo de aplicaciones para hacer opt out y no permitir que aplicaciones como Facebook, Instagram, Messenger, Oculus y WhatsApp pudieran seguirlos y recolectar información de lo que hacen en aplicaciones y sitios web que no son de Meta.
Esto comenzó a afectar los ingresos de Meta (entre muchos otros desarrolladores de aplicaciones) pero no habíamos tenido confirmación numérica del impacto. Hasta ahora.
“Creemos que el impacto de [las medidas de privacidad en] iOS será un viento en contra en nuestro negocio en 2022 el cual estará en el orden de $10 mil millones de dólares, por lo que es bastante significativo para nuestro negocio” – Dave Wehner, CFO | Meta
Boom. $10 mil millones. Eso espantó a más de un inversionista.
6 – El Metaverso aún no está aquí y construirlo toma MUCHO $$$
Facebook ya no es Facebook, es Meta. Y lo es porque, en propias palabras de Zuckerberg, el futuro es el metaverso:
“Para reflejar quiénes somos y el futuro que esperamos construir, estoy orgulloso de compartir que nuestra empresa es ahora Meta.
Nuestra misión sigue siendo la misma: todavía se trata de unir a las personas. Nuestras aplicaciones y sus marcas tampoco están cambiando. Seguimos siendo la empresa que diseña tecnología en torno a las personas.
Pero todos nuestros productos, incluidas nuestras aplicaciones, ahora comparten una nueva visión: ayudar a dar vida al metaverso. Y ahora tenemos un nombre que refleja la amplitud de lo que hacemos.
A partir de ahora, seremos metaversos primero, no Facebook primero.” – Mark Zuckerberg
El tema es que el Metaverso todavía no está aquí. Y no estará aquí antes de la próxima década. Pero Facebook no puede dejar que le pase lo que le pasó con la revolución móvil, en la que a pesar de ser mucho más grande (en usuarios) que Google y Apple quedó amarrado a sus dispositivos y a sus reglas pues sin ellos los usuarios no pueden acceder a sus plataformas.
El Metaverso se construye en varias capas. Necesita hardware, necesita conectividad, necesita software, necesita contenidos, necesita reglas, privacidad y seguridad, necesita interoperabilidad y todo ello requiere de inversiones de capital que desde un comienzo, Zuckerberg le informó a sus accionistas iban a ser costosas. Pero al parecer esos inversionistas no entendieron la dimensión de lo que Zuck les estaba diciendo.
Durante el 2022 Meta invirtió en el Metaverso cerca de $12,468 Millones de dólares, una cifra nada despreciable pero en la que aún no se ven los resultados. Los inversionistas parecen no tener la paciencia para esperar a ver si el sueño de Zuckerberg se materializa y si estas inversiones traerán réditos.
6 razones, cada una de ellas poderosa en sí misma, que juntas han creado un vortex de animadversión hacia la compañía y que -por fin- le ha pasado factura. Ahora tendremos que ver qué ocurre en las próximas semanas y si vemos una corrección hacia arriba en el precio de la acción o si permanece en este nuevo rango que, de todas maneras, sigue siendo superior al precio que tuvo la acción en toda su historia y hasta Junio del 2020.