Tengo una teoría acerca de la piratería de medios. No lo puedo negar, es obvio que el precio es un factor importante por considerar cuando se habla de piratería. Pero personalmente estoy convencido que el precio no es el factor principal que nos impulsa a consumir contenidos piratas. Para mi, el factor principal es la conveniencia de acceso, o dicho de una manera diferente, el servicio al cliente. Históricamente, los productores de contenido han basado su modelo de negocio controlando la experiencia de uso del consumidor.
Por ejemplo, miremos a la industria de la música. Ellos han sustentado una proporción muy importante de sus ingresos empaquetando contenidos. Por décadas obligaron a los usuarios a comprar colecciones de 10–12 canciones en las cuales hay uno o dos hits y las demás son relleno que justifica el precio inflado. En la televisión sucede algo similar. Pagamos una suscripción de cable a un servicio que ofrece 200 canales, cada uno transmitiendo 24 horas continuas de contenidos que nunca vemos. En la realidad solo consumimos 2 o 3 programas a la semana. Pero tenemos que pagar por contenidos que no nos interesan para sustentar el precio elevado que nos cobran.
Cualquier persona que haya estudiado estrategia empresarial sabe que uno de los factores principales de éxito es el servicio al cliente. De ahí la frase paradigmática, “el cliente tiene siempre la razón”. Los productores de medios se han esforzado por controlar el medio de distribución para poder sostener su modelo de negocio. Para ellos no importa la conveniencia de los usuarios. Nos exprimen de nuestro dinero regularmente, obligando cambios de formato cada cierto tiempo, en el caso de la música, o controlando tiempo y lugar de consumo, en el caso de la televisión y cine.
Gracias a su negativa de ofrecer conveniencia a los usuarios, la industria sufre de un ciclo de crisis/recuperación recurrente. Los modelos disruptivos para la industria de contenidos aparecen usualmente primero a través de modelos piratas que luego algún emprendedor aplica de una manera legal. En cualquiera de los casos, el factor común es la innovación.
Apple rompió, de manera legal, el modelo de negocio de la música, ofreciendo la posibilidad de comprar canciones al detal en su almacén de música virtual. Pero antes del Apple Music Store, tuvimos a Napster, un modelo pirata que hacía exactamente lo mismo. Netflix hizo lo propio ofreciendo la posibilidad de acceder legalmente a contenido audiovisual. Su modelo, disruptivo, eliminó inicialmente las multas y restricciones que imponían las tiendas de alquiler como Blockbuster. Pero luego tuvieron que pasar a la distribución digital, presionados en buena parte por la piratería rampante de torrents.
Un detalle interesante es que con la aparición de los modelos convenientes legales ha sido posible documentar, de manera empírica, que al mismo tiempo hay una caída del interés en la piratería. Pero poco a poco en la industria pirata aparece una nueva innovación que vuelve a mover la aguja. En la industria musical hemos leído acerca de las batallas por dominar el streaming, que ya se ha legalizado muy a pesar de las protestas de los artistas. En los medios audiovisuales estamos entrando justo en una de esas batallas. El medio pirata en cuestión se llama Popcorn Time. Si quiere saber un poco mas acerca de Popcorn Time, le este artículo publicado hace un tiempo en TECHcetera. Es la mayor amenaza para Netflix, pues ofrece mayor conveniencia, ya que no hay límite en la disponibilidad de contenidos, y obviamente un mejor precio. Unos gráficos publicados por Netflix respecto a las búsquedas en Google en el mercado holandés muestran las razones que tiene Reed Hastings para preocuparse. Popcorn Time está ganando recordación entre las personas.
Netflix vs. Torrent
Netflix vs HBO vs Popcorn Time
Popcorn Time
Todavía es un fenómeno de nicho entre los usuarios mas avanzados. Pero es solo cuestión de tiempo para que haya una adopción masiva. La pregunta clave que se hace Reed Hastings es como lograr ajustar nuevamente su modelo de negocio para contrarrestar este modelo pirata. Ajustarse al modelo digital casi le cuesta la compañía hace unos cuantos años. ¿Vendrá la innovación de unos emprendedores diferentes? Amanecerá y veremos.