Leí una noticia hace unos días en el New York Post sobre Gene Freidman – el “Uldarico de Nueva York” – y cómo gracias a Uber, Lyft y otras soluciones de ride-sharing el personaje está en la quiebra y Citibank lo está demandando.
La verdad la dejé por ahí, en mi reading list, sin ponerle mucha atención. Hasta ayer.
Cuando me di cuenta que mi artículo “Ministro: Y Después de Uber, Quien Sigue?” había gustado (gracias a los que lo compartieron, la re-twittearon, le dieron like, la discutieron y/o me escribieron) la retomé, tratando de entender qué de la experiencia de la Gran Manzana puede replicarse en Ciudad Caótica (o sea Bogotá) y qué cosas podríamos llegar a ver en un futuro cercano.
Lo primero que hay que explicar es el modelo de negocio de Freidman. El personaje compra (o mejor, ha comprado) cientos de Medallones (Cab Medallions) que son el equivalente de los “Cupos” que se manejan en Bogotá. En el caso de NY esos medallones son elementos físicos que los taxis deben tener para poder rodar por las calles y prestar su servicio. El negocio de Freidman es básicamente arrendarle esos medallones a conductores de taxi quienes le pagan por poder prestar el servicio en la ciudad.
El tema es que los medallones, que llegaron a costar USD 1.05 Millones hace un año, se han devaluado y su precio ha caído en cerca de un 30% y cada día son menos los conductores interesados en pagar el arriendo de los mismos para prestar el servicio. Y por ende Freidman – conocido como el “Zar de los Taxis” (igual que “Uldi”) – ha incumplido sus obligaciones de pago (USD 31.5Millones) con los bancos.
La razón? Son cada vez menos los conductores que están dispuestos a pagar el arriendo de los medallones. Por qué? Por la competencia de plataformas de ride-sharing como Uber, Lyft e incluso Zipcar. Y no sólo porque la gente prefiere usar esos servicios que percibe como mejores, más seguros, más fáciles de usar y más cool (no lo niegue: es más cool decir “me vine en Uber” que decir “me vine en taxi”), sino porque los mismos conductores que antes arrendaban el medallón ahora prefieren trabajar con las nuevas plataformas porque son a) más económicas, b) más seguras (no existe la forma en que no les paguen por el servicio) y c) más convenientes para ellos mismos.
Hoy en día hay más carros de Uber en NY que Taxis tradicionales.
En Bogotá ya lo vimos. Hace unos años, con la llegada de Tappsi, un número importantísimo de conductores (y propietarios de taxis) decidieron decirle adiós a Uldarico y a su modelo arcaico y costoso y probar suerte con la aplicación móvil. Y fue tal el impacto que el mismo Uldarico, luego de patalear y amenazar a Tappsi con cerrarlo por “competencia desleal” y llorarle al Ministerio para que los cerraran, les hizo una jugosa oferta económica (que los dueños de la compañía rechazaron).
El tema no es Uber, ni Lyft (que oí está próximo a hacer su ingreso al país), ni las soluciones de car-sharing o ride-sharing. El tema no es si se reglamenta o no un “servicio de transporte individual VIP” como dijo la Ministra. El tema es que la tecnología crea eficiencias en mercados y cambia las reglas del juego. Sólo mire el impacto de Amazon, de iTunes, del mismo Dell a comienzos a comienzos de siglo. El tema es que día a día vemos a alguien hablando de un startup como el “uber de esto” y el “uber de lo otro”. El tema es que el modelo de los cupos – que es el verdadero negocio detrás de los taxis – está obsoleto. El tema es que la gente quiere conveniencia. Y seguridad. Y respeto. Y un buen servicio.
Y generalmente las leyes y la normatividad van un paso atrás por su naturaleza paquidérmica, por la plata y los votos que hay en juego en mantener el status quo y por el analfabetismo digital que reina en quienes hacen las leyes. Pero sabe qué? Al final esa normas y se leyes se modifican. O mejor, se eliminan y se toma un modelo menos keynesiano y más de libre competencia como el planteado por Adam Smith (se me salió el Economista) que parece funcionar mejor, por lo menos para el público.
Hay algunos modelos de negocio que están condenados a desaparecer, bien sea por su carencia de eficiencia o porque plantean modelos de negocio inequitativos con respecto a los beneficios que recibe quien lo presta y quien lo recibe. Casos como estos hay miles. Sigo siendo un convencido de que los mercados autoregulados son los más eficientes y que muchas veces la política se queda rezagada e impide el libre desarrollo de los mercados.
Es responsabilidad de nosotros, los usuarios, hacer de los servicios que usamos mas eficientes, mejor adecuados a nuestras necesidades y en general mejores. Los modelos como el de los taxis en bogota son los peores, ponen el poder en las manos de unos pocos. Apoyemos las nuevas formas de trabajo. Si no me creen, preguntenle a los conductores de uber.
los usuarios debemos exigir por un buen servicio pero no podemos satanisar a todos los taxistas hay muchos que prestan el servicio de una excelente manera
Es verdad, generalizar es sesgado y poco especifico, pero sostengo mi posición despues de leer los articulos sobre la violencia que se genera por los taxistas hacia los conductores de Uber. Puede que no todos sean malos, presten un mal servicio, no lleven a la gente, cobren de mas, manejen demasiado rápido y sin interes en la seguridad de sus pasajeros, pero esa es la imagen que nos estan dejando…
La verdad del asunto es que quien no evoluciona para convertirse en una mejor opción, sea por precio, calidad, alcance o cualquier otro factor diferenciador termina extinto como los dinosaurios. Adaptación y evolución es el nombre del juego!
si eso esta bien pero hay que evolucionar en orden y con legalidad y que sea de la mejor manera no a las malas
Richard, en Colombia a los ciudadanos les está permitido hacer todo lo que no esté prohibido. Lo que pasa es que dejamos que sean los abogados los que interpreten las leyes ya que es imposible que en el momento de definirlas se piense en el futuro de sus implicaciones. Le pongo un ejemplo, en la ley judía estaba prohibido encender el fuego durante el shabbat, hoy los judíos lo interpretan como una prohibición para interactuar con aparatos eléctricos. Claramente la ley no siempre tiene en cuenta el futuro, para eso hay legisladores, y su trabajo debería poner en concordancia muchos aspectos, no solo la conveniencia de su electorado principal (taxistas).
Tienes toda la razón ahora lo que hay que ver es que para el gobierno UBER no es legal pero por que? Será algún negocio significativo para ellos? O que está sucediendo pero así como queremos avanzar los usuarios también debemos avanzar y no quedarnos en el cuento de como prohíben pues salte monos la prohibición (aunque es dificil)
es que la verdad los usuarios se cansan del mal servicio y de los cobros excesivos y eso hace que la gente deje de usar taxis y tomen UBER
esto es practicamente de todos, porque nosotros somos los beneficiarios por asi decirlo, porque si todo mundo empieza a usar esto esto va a crecer, y pues si no todos lo hacen esto no se puede convertice en una mejor opcion de uso, ya que por ahi dicen ” el que no avanza y mejora no lleva a convertirse en el mejor”
y pues yo opino que es bueno apoyar estas nuevas ayudas que nos facilitan la vida.
pregunto cuantos de nosotros hemos usado UBER….por lo menos yo no. me gustaria saber que diferencias hay entre UBER y los Taxis normales
Richard, le recomiendo el servicio.
Yo deje de tomar taxis y ahora solo uso Uber. Las razones son varias pero las principales son: La experiencia para el usuario es facil; la aplicacion es sencilla y presenta una interfaz clara y poco atiborrada; al ser confirmado el servicio (sin tener que ofrecer ‘propinas’) la posición del conductor asi como sus datos estan disponibles al usuario; en caso de contactar al conductor, estos han sido entrenados para ser amables y abiertos a cambios de planes; cuando uno se monta al carro puede escoger ir directamente a su destino o hacer paradas intermedias sin quejas por parte del conductor; el sistema de precios es claro (acepto que a veces puede ser mas costoso, pero en mi experiencia con todos los taximetros adulterados que hay en nuestra ciudad, la cosa no es que cambie tanto); por último, no hay que tener efectivo, ni preocuparse por la devuelta ni el billete de 20 para el cual nunca tienen cambio.
Puede que mi opinión este sesgada por malos servicios en taxi y buenos servicios en Uber, pero es solo mi experiencia.
Nicolas mil gracias, pues haré la prueba con UBER y pues si e escuchado que el servicio es superior y por lo que me dices y lo que muchas mas personas opinan la app, el servicio, calidad es mejor que el de los Amarillos. mil Gracias.
En mi opinión creo que la causa de que la gente pare de usar uber es que los servicios ya están hartos del mal servicio!
No soy un usuario frecuente pero creo q esa es la razón principal
otra cosa que puede llegar a suceder como en trasmilenio y es que los conductores de taxi sean contratados para UBER no se generarian los mismos inconvenientes que ahora?
Lo veo como la supervivencia del más fuerte, todos tienen que adaptarse a la época si no lo hacen su público estará muy reducido. Las leyes deben adaptarse, no deberían obligarnos a usar un solo medio de transporte ya que en teoría debería ser nuestra decisión en que nos montamos
es cierto, pero mira que pasa con trasmilenio cada vez las rutas son exclusivas de ellos y ya servicio publico es muy dificil tomar, todo por que estan con el 100% de las vias, y el servicio no es de lo mejor…lo que pasa es es un negocio redondo y no lo quieren perder
Este tema genera un “patatús” completo. En nuestro país el servicio de transporte público es pésimo. El tema de Bogotá todos lo conocemos, los taxis sólo hacen carreras a su conveniencia y tratan muy mal a los clientes; y los buses por su parte no dan abasto para la gran demanda de personas. Lo mas grave es que esta incultura ha venido tocando al resto de ciudades del país, como Bucaramanga, donde los mismos taxistas amenazan a sus clientes para bajarlos del vehículo; o en el metrolinea donde no hay caballeros que traten bien a las damas, sino sólo aquellos que “tocan” a las mujeres con perversidad, o los que prefieren atracar y lastimar. Sin embargo para el gobierno no es importante invertir en nuevas metodologías de transporte, porque es que se violan los derechos de los responsables y decentes conductores de servicios públicos.
Entre Uldarico y cualquier parecido en otra ciudad, la unica diferencia que existe es el nombre de la ciudad. No por estar en Colombia las mafias son más fuertes y poderosas, esto ocurre por los esquemas a los que veníamos acostumbrados los usuarios en todo el mundo y cuando llegan empresas como UBER, que venden es un SERVICIO y se comprometen con los usuarios a lo que realmente merecen en valor por el dinero, es cuando las mafias se ven resentidas. La generación de eficiencias y la competencia transparente, delineadas por plataformas digitales que es hacia donde nuestra actualidad ya migró, hacen de empresas como UBER el ideal para usuarios como yo, de los que estamos aburridos del maltrato y el robo.
Todo esto esta sucediendo porque los “capos” de las mafias de taxis están viendo que a sus “lavanderías” cada vez llegan menos clientes!… Estos han emigrado en busca de un mejor servicio, trato, seguridad etc….. Desafortunadamente el dueño del circo (Uldarico) maneja a los payasos a su gusto, que desgracia que estos no tengan la capacidad intelectual, ni la sabiduría, ni la mente abierta, para visualizar todo esto. Estamos ante un mundo cambiante, competente, tecnológico donde cada quien decide si se queda o avanza!….. La decisión final es del cliente que decide donde viajar!….Como van las cosas el futuro serán las aplicaciones tecnológicas, llámese UBER, CABIFY etc…..Gracias al pésimo servicio de transporte en Bogota, es vista por otras aplicaciones como buena plaza; así que prepárense porque tendremos para escoger!