Google Maps es una de esas aplicaciones que me gusta mucho, debido a su facilidad de uso. ¡No se necesita ser un científico nuclear para utilizar sus funciones básicas!
En lo personal, ¡debo decir que biológicamente me robaron! Lastimosamente, nací sin GPS interno, sin sentido de ubicación, me pierdo hasta buscando un parqueadero pero bueno, no hay mucho que hacer al respecto, más allá de suplir esas carencias con la ayuda de la tecnología.
Por lo mismo, algunas aplicaciones como Google Maps y Waze han colaborado para mantener mi falta de ubicación en estándares manejables. Ahora bien, este tipo de aplicaciones, también, muestran el tráfico ayudando a millones de usuarios a encontrar la ruta más adecuada o, en su defecto (hay momentos del día donde desplazarse de un lugar a otro de la ciudad es, prácticamente, imposible), la menos tortuosa cuando para llegar al tan anhelado destino.
La labor social generada por aplicaciones como Google Maps es bastante importante, debido a que: el tráfico pesado suele tener repercusiones en la salud mental de las personas que se desplazan de un lugar a otro, a tal punto que cuando la gente alcanza su destino, ya está cansada, irritada y molesta, ¡por todo lo que vivió en el trayecto!
Ahora bien, hasta el momento dichas aplicaciones eran más usadas por los conductores para encontrar rutas pero, todo parece indicar que esto puede estar por cambiar dado que Google Maps, además de predecir el tráfico, demoras en servicios de trenes y buses, va a llegar al punto de poder mostrar el detalle de:
La ocupación del transporte público para que, antes abordarlo, cada cual valore y, de acuerdo a su urgencia, ¡pueda decidir sí se anima o no a tomarlo!
De tal forma que como usuario, voy a poder predecir si tendré que sentirme como dentro de “una lata de sardinas” (muy espichado) o, si por el contrario, puedo hacerme ilusiones de encontrar un puesto desocupado en el bus (ojalá eso algún día pase en el transmilenio de Bogotá).
Todo eso va a poder inferirse a través de un sistema de convenciones, que se mide de acuerdo a la cantidad de siluetas (o “muñecos” como muchos los llaman) que aparecerán en una determinada ruta. Así las cosas, una silueta implica que estará desocupado y cuatro que el transporte viene totalmente lleno.
Estas actualizaciones de Google Maps llegarán paulatinamente a los usuarios pero, aún no se tiene el detalle exacto acerca de ¿cuál sería el ordene especifico a nivel de ciudades? Seguramente, las primeras serán las más transitadas u ocupadas del mundo.