No ha habido un iPhone más polémico en la historia que el iPhone 8. Posiblemente por la decisión de llamarlo 8 y no 7S, a pesar de no ofrecer grandes cambios vs el modelo anterior, posiblemente por la diferenciación de funcionalidad en las cámaras entre el 8 y el 8 Plus (que pensamos era una cosa solo de un año pero que parece se mantendrá) y muy posiblemente porque su lanzamiento se hizo al mismo tiempo que el anuncio (mas no la venta) del iPhone X.
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Estos 3 factores han hecho que las ventas del iPhone 8 no sean las mejores en estas primeras semanas, según reportes de diversos medios en Estados Unidos y Europa (sin embargo creo que hay más de fondo: quienes cambian de iPhone en la primera tanda, durante Octubre, somos los más fans y casi todos estamos esperando el X. Las ventas del 8 y del 8 Plus crecerán en Noviembre y Diciembre, pero sobretodo el próximo año).
Y a pesar de las ventas, el iPhone 8 es el mejor iPhone que ha habido en la historia, hasta ahora (bueno, en realidad creo que es el iPhone 8 Plus pero eso lo dirá Felipe en unos días) . El nuevo procesador, la mejora en las cámaras y la conveniencia de poder (esa es la palabra clave poder y no tener que) cargarlo inalámbricamente construyen sobre un dispositivo que para muchos de nosotros ofrece la mejor experiencia del mercado, no solo por lo que es sino por como se integra con el resto del ecosistema.
Si. El diseño es el mismo que el del iPhone 7, salvo por la presencia de vidrio en la parte trasera. Y esa es la crítica más grande que ha habido del dispositivo, sobre todo porque durante el año el modelo de pantallas sin bordes se ha masificado gracias a lanzamientos como los del Samsung Galaxy S8, el LG G6, el Huawei Mate 10, el Essential Phone, el Xiaomi Mi Mix 2 y hasta el mismo Google con sus nuevos Pixel y el formato tradicional del iPhone parece “aburrido” y desactualizado (aunque el G6 no se vendió, el Essential está en rebaja porque nadie lo compra y al parecer Google tiene problemas con sus pantallas).
Hay poco que decir al respecto. Por el frente es el mismo iPhone que usted vio en el 7, en el 6s y en el 6, visualmente hablando. Sin embargo por detrás y por dentro hay mejoras interesantes.
La sola introducción de vidrio en la parte trasera – a lo iPhone 4s – hace que el iPhone 8 se vea mucho más bonito que sus antecesores, especialmente en las versiones dorada (que en realidad es pink gold) y plateada. Y, extrañamente hace que se sienta menos resbaloso (claro, también duplica la posibilidad de terminar con el vidrio roto y, por lo que hemos podido validar con la gente de Apple, es más caro arreglar el panel trasero que la pantalla del dispositivo).
El iPhone 8 puede ser el “mejor y más aburrido smartphone” del mercado, como dijo David Pierce en su evaluación para Wired hace unas semanas.
El iPhone 8 le saca el jugo a iOS 11 como ningún otro equipo, comenzando con el proceso de setup. Si su equipo actual tiene iOS 11 solo debe enfocar su pantalla con la cámara del nuevo iPhone y voilá este se configurará de manera automática (así como se configura el Apple Watch). Pero lamentablemente la segmentación de cámaras y la falta de la cámara dual posterior en el iPhone 8 (sólo está disponible para el 8 Plus) hace que se pierdan opciones super interesantes a nivel de fotografía y que muchos usuarios no tengan la opción de usarlas porque no quieren un teléfono tan grande como el 8 Plus (en esto creo que el approach de Google es mejor).
Con el iPhone 8, y en general con su nuevo lineup, Apple está jugando un juego necesario pero peligroso. Por un lado quiere ofrecer “un iPhone para todos” como lo dijo Angela Ahrendts, la SVP de ventas de la compañía, en una entrevista esta semana a CNBC pero por otro puede terminar impactando el proceso de decisión de compra que hasta el año pasado era sencillo: ¿Grande o pequeño? ¿Con cuanta memoria? Listo! y puede terminar pasándole lo que a Samsung con el Galaxy S7 / S7 Edge (es decir que la gente veía el S7 Edge como el smartphone que quería pero no podía comprar y el S7 como el que podía pero no quería comprar y terminó comprando otro).
El iPhone 8 no tiene puerto de audio de 3.5mm. GET OVER IT!!! No tiene y nunca va a volver a tener y poco a poco más smartphones del mercado lo van a perder (como ya vemos que comienza a ocurrir). El futuro es inalámbrico y así como hace años que no conecto mi iPhone a mi computador, y como desde el año pasado no conecto audífonos de cable, tampoco lo haré a a la corriente en un futuro cercano.
El iPhone 8 introduce varias tecnologías que – como he dicho en el pasado – hay que probar para entender. True Tone, por ejemplo trae al iPhone algo que está disponible en el iPad desde el año pasado y que mejora radicalmente la visualización de contenidos gracias al análisis de las condiciones de luz.
El nuevo chip A11 Bionic es absurdo a nivel de performance, sin importar los cores y el RAM contra el que compita (aquí hay un buen resumen didáctico de diferentes benchmarks) y la introducción de un chip específico con una red neuronal incorporada en su diseño físico generará beneficios de uso que aún no podemos entender. Piense bien eso: no solo hay 6 cores (4 eficientes y 2 de high-performance) que son 70% y 25% más rápidos que los del A10 Fusion sino que el procesador puede hacer 600,000,000,000 de operaciones por segundo, incluidas varias basadas en protocolos de machine Learning e inteligencia artificial.
El nuevo iPhone solo viene en 2 configuraciones de memoria: 64 y 256 GB y aunque gracias a los nuevos formatos de imágenes y video de iOS 11 el dispositivo optimiza el almacenamiento interno yo me iría por el de 256GB.
La batería del iPhone 8 es un poco más pequeña que la del iPhone 7, 1821mAh, pero Apple dice que debería durar mas o menos lo mismo por mejoras en el consumo de varios componentes. Amanecerá y veremos, pero en esta semana de pruebas esa frase parece cumplirse.
Dejemos algo claro: la principal competencia del iPhone 8 no es Android, ni tampoco el iPhone X. La principal competencia del iPhone 8 es el iPhone 7 (pasa igual en el modelo Plus) que se mantiene en la parrilla pero con un precio descontado que oscila entre 130 y 200 dólares menos, según el modelo (aunque con la mitad del almacenamiento).
Hace ya unas semanas escribí una guía para escoger el modelo de iPhone que más se acople a sus necesidades. Lo invito a que le de una mirada. ¿Vale la pena subirse de un iPhone 7 a un iPhone 8? No creo. De un 6S o anterior creo que sí. ¿Es el iPhone 8 el smartphone por el que un usuario de Android se cambiaría de plataforma? No. En lo absoluto. Y menos este año. El iPhone 8 está pensando en el usuario de iPhone que tiene uno de 2 o más años y que quiere actualizar un equipo por otro que ya conoce, que ya domina, que sabe utilizar y que ofrecerá la misma experiencia pero mejorada.
Y es extraño pensar en que el iPhone 8 y el 8 Plus ya no son los flagships de Apple. Es extraño pensar que estos dispositivos han sido puestos en una categoría secundaria por primera vez. Es extraño pensar que el 8 es hoy lo que fue el 5C en su momento: una máquina poderosa en un empaque ya conocido y tradicional.
Me gusta algunas modificaciones técnicas que hicieron.
A mi también! Y en serio creo que es el mejor iPhone hasta ahora. Pero la sombra del X es grande y creo que el look ya esta un poco “quemado” (como dicen mis hijos). Gracias por comentar!