Bumble, la red social de citas, ha querido entender algunos de los efectos negativos que el ciberacoso puede llegar a tener en la vida de las personas, tanto en línea como fuera de ella. El estudio, encargado por Bumble y ejecutado por Ipsos, logró revelar que el ciberacoso, en algunas de sus formas más comunes (bodyshaming, acoso sexual e insultos en línea, así como también doxing, porno de venganza y cyberflashing), es percibido como un problema bastante grave por un número significativo de los encuestados en Colombia, y que podría estar ocurriendo mucho más a menudo de lo que se puede llegar a pensar.
Según se ha podido descubrir, casi 1 de cada 2 encuestados afirma haber experimentado ciberacoso o conocer a alguien que lo haya vivido. Sin embargo, al analizar por grupos de edad, hay diferencias importantes. Mientras que el 45% de la Generación Z encuestada aseveró haber vivido acoso en línea o conocer a alguien que lo haya vivido, sólo el 34% de los encuestados de la Generación X estuvo de acuerdo con dicha aseveración. ¡Todos los detalles los presentamos en breve!
Conozca los grupos vulnerables, los más afectados por el acoso en línea en Colombia
Debe tener presente que este fenómeno se percibe como un problema que consigue afectar primordialmente a las mujeres en un (97%) y a los miembros de la comunidad LGBTQIA+ con un (82%) según los encuestados.
Según aseveró Payton Iheme, Vicepresidenta Global de Políticas de Bumble, “el ciberacoso es una forma implacable y cotidiana de violencia que hace que quienes lo experimentan, predominantemente mujeres, se sientan angustiadas, abusadas y vulnerables en línea”.
En este sentido, Payton Iheme también mencionó que esto consigue dificultar su presencia, voz y también la participación en Internet. De ahí proviene la importancia de concienciar y frenar este tipo de comportamientos.
Tanto hombres como mujeres son conscientes de este problema; 92% de las mujeres encuestadas en Colombia consideró que el acoso en línea ocurre con frecuencia y el 83% de los hombres estuvo de acuerdo con esta afirmación. Lo cierto es que la prevalencia del acoso en línea en las mujeres es un problema nacional. Según el DANE, Departamento Administrativo Nacional de Estadística, en el país, las mujeres son las mayores víctimas de acoso en línea, con más de 300.000 casos al año (2022).
Según la encuesta de Bumble en Colombia, el 38% de las mujeres, así como el 45% de las personas entre 18 y 29 años (45%) reportaron haber experimentado o conocer a alguien cercano que experimentó acoso en línea. Incluso, según los encuestados, la mayoría de las personas que habían cometido ciberacoso eran hombres con un (70%).
Es importante señalar que el acoso cibernético con un (91%), el acoso sexual en línea con un (90%), e incluso, los insultos ofensivos con un (89%) y la pornovenganza con un (83%) se consideran las formas de acoso en línea más frecuentes. En general, los colombianos piensan que las diferentes formas de ciberacoso deberían ser delitos juzgados por la ley y el 75% de los encuestados considera que las regulaciones actuales sobre el acoso en línea no son suficientes.
La vida tras el acoso en línea
Los efectos del ciberacoso no solo abarcan a la salud mental de la persona, sino que también acrecienta la preocupación por su seguridad y su comportamiento en línea y fuera de ella. De acuerdo con la encuesta de Bumble, tras sufrir acoso, la mayoría de las personas expresaron haber cambiado la configuración de su cuenta con un (85%), así como también haber dejado de tener contacto con el agresor con un (84%) y haber experimentado ansiedad o estrés en un (81%). Además, un (47%) de los encuestados optaron por dejar de utilizar las redes sociales u otras aplicaciones, y cesaron el contacto con amigos o familiares en un (41%).
Según ha indicado Iheme, “Los esfuerzos para abordar el ciberacoso y promover un entorno en línea más seguro son verdaderamente esenciales. Esto incluye el desarrollo y la aplicación de regulaciones, la implementación de sistemas de denuncia eficaces y también el fomento de una cultura en línea solidaria e inclusiva”.
Así mismo, Iheme ha señalado que la colaboración entre los gobiernos, así como también las plataformas de Internet y los usuarios es realmente inherente para crear un entorno en el que todos puedan disfrutar plenamente de los beneficios de Internet.
