Para nadie es un secreto que a las mujeres les encanta arreglarse las uñas, pero este proceso puede ser laborioso; encontrar un horario para hacérselas, conducir hacia y desde el salón y pasar horas mientras la manicurista realiza el trabajo, sin duda puede ser un poco tedioso en ocasiones. Esto, viene siendo un ritual en el que participa una cuarta parte de todas las mujeres estadounidenses, impulsando la industria del cuidado de las uñas valorada en 11.000 millones de dólares y 53.000 salones en todo el país. Pero, una startup llamada 10Beauty quiere transformar radicalmente el mercado de la manicura. Durante 4 años, con un equipo de 35 ingenieros y 38 millones de dólares en financiación de capital, desarrolló un robot (manicurista, por decirlo de algún modo) que puede llevar a cabo cada parte de una manicura tradicional; quitar el esmalte de uñas viejo, darle forma a la uña y pintar varias capas, entre otros. A continuación, le contamos todo lo que tiene que conocer sobre este robot manicurista!
Robot manicurista de la startup 10Beauty
La máquina de 10Beauty no está diseñada para competir directamente con los técnicos de uñas profesionales, al menos no al principio. En el lanzamiento, la compañía debutará en lugares donde los consumidores normalmente no se hacen las uñas, incluidos salones de belleza de alta gama y minoristas como Nordstrom y Ulta Beauty, donde las personas tienen la capacidad de poder hacerse la manicura mientras compran. Una manicura costará entre $ 25 y $ 35, dependiendo de la ubicación, lo que la hace a la par, o un poco menos costosa, que una manicura de salón. Según se informa, las máquinas se enviarán este verano y estarán en pleno funcionamiento a finales de año.
Detalles que debe conocer
La startup 10Beauty viene siendo una creación de Alex Shashou y Justin Effron, amigos que se conocieron mientras asistían a la Universidad de Pensilvania. Cabe destacar que, después de la universidad, unieron fuerzas para lanzar Alice, una plataforma que ayuda a los hoteles a comunicarse mejor con sus huéspedes y su personal. El negocio tuvo éxito, llegó a 3.500 hoteles y en el año de 2019 lo vendieron a Expedia.
Tiempo después, quisieron pensar en su próxima idea para su empresa, lo cual era más ambicioso, y se trataba de algo en el mundo de la belleza, (robot manicurista), pensaron que muchas cosas en cuanto a los productos se habían realizado, pero no en cuanto a los servicios, estos no habían evolucionado mucho. Aunque fue todo un proceso, les llevó un tiempo determinar si era científicamente posible lograr una manicura completamente automatizada.
Primero lograron (junto con un robotista y otros inversores importantes) crear un prototipo el cual era muy grande, pero tiempo más tarde lograron la maquina final llamada “The 10”, la cual se encuentra actualmente en producción en Malasia. Tiene el tamaño de una caja de zapatos grande y permite al usuario colocar cómodamente la mano en su interior. Incluso, según Chris Casey, un robotista que los acompaño para poder llevar a cabo esta innovación, señaló que vió un prototipo final de la máquina en las oficinas de 10Beauty en las afueras de Boston.
Según Casey la máquina funciona un poco como una impresora 3D, con un mango pequeño que puede contener varias herramientas, incluido el cortaúñas y el cepillo para esmalte, y moverse en muchas direcciones a través de la uña. Al igual que con una máquina Keurig, se inserta una cápsula para cada nueva manicura que contiene todos los materiales necesarios, incluida una esponja llena de quitaesmalte y cepillos precargados con la propia línea de esmaltes de uñas no tóxicos de la marca, fabricados en asociación con un gran fabricante.
Conforme la máquina ejecuta el proceso de manicura, su brazo recoge una herramienta a la vez. Se comienza retirando el esmalte viejo con la mencionada esponja empapada en acetona. Luego utiliza una pequeña herramienta cilíndrica que no tiene bordes afilados llamada lima de vidrio grabada para dar forma a las uñas según las especificaciones deseadas del cliente. Luego, la máquina empuja la cutícula hacia atrás con una herramienta de punta blanda, aplica otra capa de acetona y luego pinta y seca las uñas. Todo el proceso dura 17 minutos por mano, aunque puede llevar menos tiempo si, por ejemplo, no necesita quitar el esmalte de uñas o si no necesita varias capas.
Dentro del dispositivo, las computadoras realizan cálculos complejos para determinar dónde pintar en la superficie de las uñas y exactamente cuánta pintura liberar en el pincel.
Cabe aclarar que, aunque 10Beauty no es la única startup que ha intentado automatizar una manicura. Ya existen otras máquinas en el mercado que utilizan tecnología de reconocimiento de imágenes y robótica para pintar uñas, incluidas Clockwork y Nimble.
Pero Shashou y Effron querían construir una máquina que pudiera replicar completamente la experiencia y la calidad de una manicura de salón, creyendo que esto sería más transformador para la industria y ayudaría a impulsarla hacia adelante. Pero esto significó gastar más tiempo y dinero en tareas complejas, como dar forma a las uñas de forma segura.
El minorista Ulta Beauty fue uno de los que decidió invertir capital en la startup a través de su brazo de inversión, Prisma Ventures. Agustina Sartori, que dirige Prisma Ventures, cree que las máquinas ofrecen una comodidad sin precedentes porque pueden usarse en lugares como hoteles y grandes almacenes, donde las mujeres ya pasan tiempo.
Primeramente, Shashou y Effron planearon crear máquinas personales que las personas pudieran usar en casa. Pero cuando comenzaron a construir la máquina y a estudiar el mercado, se les ocurrió que llevaría tiempo convencer a los consumidores de que cambiaran su comportamiento y dejaran de ir al salón. Por otro lado, su investigación de mercado encontró que el 98% de las mujeres desearían poder arreglarse las uñas en su peluquería. Y, sin embargo, sólo el 5% de las peluquerías ofrecen manicura. Según Shashou, para ellos es muy caro contratar a un técnico de uñas para que les proporcione este servicio adicional.
10beauty una operación de empresa a empresa
10Beauty se lanza ahora como una operación de empresa a empresa. Ya se han asociado con docenas de peluquerías de alto nivel que alquilarán la máquina y encargarán las cápsulas que usan los clientes. Los clientes pueden arreglarse las uñas durante su cita con el cabello, lo que les ahorra tiempo.
Pero, esto no queda aquí, hay muchos otros lugares donde tiene sentido que la gente se haga la manicura, como en un hotel antes de un evento de trabajo o una boda; en el gimnasio después de hacer ejercicio; o mientras sale de compras. 10Beauty ya se ha asociado con cadenas hoteleras y varios grandes minoristas además de Ulta Beauty y Nordstrom. Se espera que el producto esté disponible en 1.000 ubicaciones este otoño, lo que representa un potencial de unos 13 millones de dólares en ingresos en el primer año de actividad.
Shashou ha señalado que con el tiempo, cuando los consumidores hayan tenido la oportunidad de conocer la tecnología, 10Beauty comenzará a fabricar máquinas personales para uso doméstico. Esto podría potencialmente desplazar a los casi 200.000 técnicos de uñas que trabajan en Estados Unidos. No está claro qué significará esto para la fuerza laboral de tecnología de uñas: pueden encontrar trabajo realizando tareas más complejas en el sector de la belleza o incluso, encontrar trabajo fuera de la industria por completo.
Shashou espera que 10Beauty sea, en última instancia, mucho más que solo manicuras. Según se informa, el objetivo es desplegar el equipo de ingenieros para automatizar muchos otros servicios de belleza que hasta el momento, han sido realizados por humanos, incluidos, quizás, los servicios capilares.