Cada día utilizamos más el mundo digital bien sea para iniciar sesión en las redes sociales, comunicarnos por correo electrónico, hasta incluso utilizar motores de búsqueda entre otros, por lo tanto, hay que tener presente que cada uno de estos servicios con el que interactuamos requiere información como inicios de sesión, detalles de contacto por ejemplo, para poder mantener las cuentas seguras o incluso ofrecer experiencias personalizadas, entre otros. En este sentido, ESET, ha recomendado limitar el volumen de información que se publica en Internet y que se comparte con estas organizaciones, para mitigar o aminorar los riesgos de seguridad y privacidad.
Conozca las 10 formas de reducir la huella digital
Según ha advertido Camilo Gutiérrez Amaya de ESET Latinoamérica, cuanto más sean los sitios y aplicaciones con los que se comparta información personal y de su cuenta, más posibilidades tendrá de que sus datos terminen siendo expuestos, tanto si una de esas compañías se ve comprometida, como también si los cibercriminales lo llegan a atacar directamente. Incluso, Gutiérrez también ha manifestado que si se publica contenido en las redes sociales por ejemplo, no sólo pone en riesgo su propia seguridad y privacidad, sino que en caso de utilizar un dispositivo de trabajo o compartir información corporativa, también puede representar una amenaza para su empleador, lo que estaría aumentando aún más el alcance de los riesgos.
Ahora bien, debido a estos y otros aspectos limitar lo que se publica y se comparte en línea tiene sentido en un mundo digital cada día más poblado por cibercriminales y estafadores. Sin embargo, hay que acotar que con tanta información distribuida en potencialmente tantos sitios web, así como también cuentas y dispositivos, puede llegar a ser dificultoso saber por dónde comenzar.
Por tal motivo, ESET comparte 10 formas de reducir la huella digital:
- La primera de ellas es; descargar menos aplicaciones: hay que tener presente que las aplicaciones móviles por lo general, requieren que los usuarios ingresen una cantidad significativa de información personal y/o financiera para poder funcionar según lo previsto. Incluso, también pueden rastrear la ubicación, así como también la actividad de navegación y así mismo, otra información que luego se comparte con terceros. Por lo tanto, es lógico pensar que cuanto menos sean las aplicaciones en las que se haya registrado, menos expuesta este la información.
Un dato muy importante que se debe tener en cuenta es que antes de realizar una descarga se tiene que investigar para analizar si se trata de algo que realmente se necesita. Incluso, se recomienda “limpiar” de manera habitual los dispositivos para poder eliminar cualquier aplicación que no se haya usado en mucho tiempo y así mismo chequear los permisos de las aplicaciones que se conserven.
- También se encuentra configurar menos cuentas en línea y limpiar las existentes: hay que señalar que las empresas no solo quieren atención, quieren lealtad. Es por tal motivo que muchas presionan para configurar cuentas y que se comparta información que luego se monetizará. Este podría ser el caso de una tienda en línea o incluso hasta de un portal de noticias. Es importante evitarlo, incluso si eso significa que el pago y las credenciales de inicio no se guardarán en el navegador y se necesitará colocarlos de forma manual la próxima vez que se ingrese. Volver a cargar esta información es un pequeño paso extra que representa por lo general, el precio que se paga por una mayor privacidad y seguridad.
- Se debe tener exclusivo cuidado de no compartir datos confidenciales: en ocasiones, compartir información resulta algo inevitable para obtener los bienes o servicios que necesitamos. Pero, es vital tener en cuenta qué información estamos entregando. A menos que sea estrictamente necesario, no comparta aspectos como por ejemplo; números de teléfono, direcciones de correo electrónico, así como tampoco el domicilio, detalles financieros o alguna otra información personal identificable, que poseen una gran demanda en la clandestinidad del delito cibernético.
- Se tiene que pensar dos veces antes de compartir algo en redes sociales: como bien sabemos, el contenido que se comparta será compartido y prácticamente imposible de eliminar una vez que esté en el dominio digital. Por tal razón, es importante considerar cómo ese contenido puede ser recibido por otros, incluyendo a posibles empleadores, y si contiene información confidencial sobre el trabajo y su vida personal. Incluso, otro aspecto importante es que también debe considerar limitar la visibilidad del perfil a los amigos/contactos en línea, y no agregar a nadie que no se conozca en la vida física.
- Otra forma de reducir la huella digital es ejercer el derecho al olvido o el derecho de supresión: se debe tener presente que para muchas personas en diversas partes del mundo existe algo que se conoce como; derecho al olvido y el derecho a la supresión, lo cuales permiten a las personas poder solicitar que cierta información sea borrada de Internet. Se debe buscar su nombre en Internet para poder observar qué se encuentra y posteriormente, se contacta a los propietarios del sitio web para solicitar la eliminación del determinado contenido. Luego, hay que comunicarse con los motores de búsqueda para hacer exactamente lo mismo.
- Se tiene que mantener la ubicación en secreto: una de las maneras más intrusivas de capturar datos es la que rastrea la ubicación. A partir de esto, terceros pueden reconstruir una imagen crecidamente precisa de movimientos y también de hábitos diarios. Esto no solo estaría poniendo en riesgo la privacidad digital, sino que también podría estar colocando en peligro la seguridad física. Por lo tanto, debe cerciorarse de evitar que las aplicaciones que no lo necesitan rastreen la ubicación.
- Otro punto vital es no completar cualquier encuesta en línea: Internet se encuentra llena de concursos y también de ofertas de premios, por lo general, a cambio de completar una encuesta o ejecutar una acción parecida. Algunas pueden ser campañas de marketing que buscan fundar listas de contactos. Pero, también otras pueden ser esfuerzos de criminales creados para poder robar información personal para su uso en campañas de phishing y/o para vender en la dark web (web oscura).
- Ser duro o despiadado con los newsletters: es vital recordar que las empresas suelen enviar newsletters (boletines digitales) y gran parte de estos correos obstruyen la bandeja de entrada, por lo tanto, se recomienda tener un orden y recibir solo lo fundamental. Si se cree necesario, una buena idea sería hacer uso de una dirección de correo electrónico dedicada para estos fines o incluso, una cuenta de correo electrónico desechable.
- Para poder reducir la huella digital otro aspecto importante es desactivar cookies de terceros: Las cookies vienen siendo pequeños archivos que se descargan en la PC o dispositivo cuando se visita un sitio web. Son usadas por los propietarios de los sitios para poder perfilar quién está visitando su sitio y así mismo, para guardar sus preferencias para futuras visitas. Hay que tener en cuenta que aunque esto puede optimar la experiencia de navegación, muchas personas prefieren no compartir este tipo de información, que podría incluir nombres de usuario y contraseñas. Opte por rechazar las cookies cuando visite un sitio web, incluso, también puede deshabilitar el seguimiento de terceros dirigiéndose a la configuración de privacidad del navegador.
- Finalmente, lo más recomendable es limitar el número de dispositivos que se utiliza: se debe considerar cuántos dispositivos y PC se tienen que utilizar activamente. Cada uno de ellos contiene datos que podrían llegar a quedar expuestos si el dispositivo se pierde o incluso si es robado.