Como ya saben, estamos en medio del CES, la mayor muestra de tecnología de consumo en el mundo. La atención se concentra en Las Vegas para ver las novedades que nos traen tanto las grandes marcas de tecnología, como Sony o Samsung, o los pequeños innovadores con sus inventos ingeniosos.
Pero algo curioso sucede. Leo las noticias con mucho detenimiento y aún no encuentro las grandes novedades de este CES. Samsung, LG y Sony, vuelven a lanzar los mismos productos una y otra vez. Estoy seguro que tienen algunas mejoras, pero nada sustancial que cambie la vida de los usuarios. Hay televisores flexibles, con mayor resolución, con imágenes mas vividas. En resumen, son aparatos mas caros que no ofrecen ninguna ventaja real sobre los que ya tenemos y que funcionan perfectamente.
También encuentro una plétora de dispositivos vestibles, pero ninguno verdaderamente novedoso. Todos son relojes inteligentes que ademas de dar la hora miden algunas variables críticas como el pulso cardiaco, la actividad física, etc… El Watch domina completamente la conversación, a pesar de que Apple no está presente en la muestra. Para ser sincero con ustedes, aún me debato en el caso de uso del Watch. Supongo que los fabricantes también están esperando a ver que sucede con el, para dar sus siguientes pasos estratégicos. Nuevamente, en esta categoría no hay nada que llame la atención como para cambiar radicalmente nuestras vidas.
Aunque no he encontrado muchas referencias en la presa especializada, estoy seguro que el “internet de las cosas” tiene una presencia importante en el CES. Todo tipo de aparatos conectados a internet con funciones inteligentes que pueden ser administradas desde cualquier lugar del mundo. Cafeteras, sistemas de seguridad, enchufes, termostatos, en fin nombre la categoría y habrá un producto. De todo lo que he visto hasta ahora solo uno de ellos tiene potencial de cambiar la vida de los usuarios y es una lavadora dual que lanzó LG. Curiosamente no es inteligente, pero porque la inteligencia se la transmite al usuario, que con ella puede lavar dos cargas simultáneamente ahorrando tiempo y dinero a las familias que la compren.
Todo esto me lleva a pensar que el péndulo de la tecnología se está moviendo nuevamente. Estamos regresando a una época en la cual los avances en los dispositivos se van a ver eclipsados por los avances en el software y en los servicios online. Llegamos al punto en el cual el esfuerzo necesario para que los aparatos tengan avances tecnológicos significativos es demasiado alto. El problema que tenemos los usuarios es aprovechar, de una manera práctica, toda la información y capacidad que ofrecen los dispositivos para algo productivo.
Hay miles de dispositivos vestibles en el mercado que capturan todo tipo de información sobre nuestro comportamiento. Pero hay pocos servicios que aprovechan esa información para algo mas interesante que construir reportes de actividades diarias y compartirlos en las redes sociales. Yo espero que emprendedores y científicos empiecen a cruzar esa información y a derivar conclusiones, de manera que yo pueda perfilar mis hábitos y ajustarlos para llevar una vida mas sana.
Mi smartphone está capturando muchísima información acerca de mis actividades diarias. ¿Debo reducir o aumentar mi plan de datos? ¿Debo cambiar mi forma de transporte? ¿Cuáles son las principales actividades que dominan mi día? Mi smartphone lo sabe, yo todavía lo estoy tratando de adivinar. Algunos emprendedores empiezan a sacar conclusiones de esa información. Hace algún tiempo hablaba de algunas aplicaciones que ayudan a mejorar la vida de la batería de nuestros dispositivos. Es el mismo concepto aplicado a una necesidad mundana. Me encantaría entregarle mi data al gobierno municipal, y que hiciera mapas con el patrón de movimiento de miles de personas que cargan su smartphone, capturan cada uno de sus movimientos, y optimizara las rutas de transporte público como consecuencia de ello. Waze lo hace y es una de las aplicaciones de las que mas se habla en las reuniones sociales a las que asistí durante el fin de año.
Me puedo quedar escribiendo párrafos y párrafos acerca de las posibilidades que ofrece la tecnología actual y que no se explota todavía. Creo que estamos ad-portas de una nueva era dorada para los desarrolladores de software, en especial software analítico. El CES no es el lugar para encontrar lo que hará noticia en el mundo de la tecnología en los próximos años. Hay que estar pendientes de los eventos de emprendimiento y de la actividad de capital de riesgo este año. El futuro mas próximo está en el software.
