En mi entrada pasada propuse seis características que debían tener los juegos “electrónicos” para ser didácticos. Ahora en esta entrada voy a sugerir dos juegos que me he ido encontrando por ahí y he visto recomendados como juegos educativos gracias a recomendaciones de sitios educativos como @edudemics, @edutopia y otros. También, y como no soy jugadora leí algunos “reviews”, y por supuesto mi fuente vital de información Wikipedia.
El primer juego es Skyrim que es un juego de rol donde el estudiante puede crear su personaje, avatar como dicen, que lucha contra un dragón en mundo mágico, a la mejor manera de una historia de Tolkien o de la saga de Harry Potter o de la Guerra de la Galaxias. Se vendieron 3.5 milliones en 48 horas cuando salió a la venta en noviembre de 2011, se puede jugar en un Playstation 3, XBox 360 o un PC con Windows.
Dice Edudemic que en realidad cualquier área del currículo es cubierta por este juego. Según lo que leí en Wikipedia el juego en realidad es como una gran novela, una película o una increíble obra de teatro, o tal vez todos a la vez. Es una saga, es una aventura, los personajes incluido el jugador van desarrollando habilidades y destrezas a medida que el juego avanza. Entonces que sea un motivo para ponerle algo de emoción a la clase de lenguaje.
Puede ser jugado por estudiantes mayores de 12 años en adelante que pueden jugar en el idioma que más le convenga escogiendo entre el inglés, francés, alemán, portugués y otros.
Edudemics y Wikipedia desde perspectivas distintas coinciden en que el juego desarrolla habilidades para colaborar, resolver problemas y se usan múltiples inteligencias para poder avanzar.
El segundo juego es Civilization V. Debo decir, primero, que jugué Civilization probablemente en una versión 1 o incluso previa a la 1 si existe . Rápidamente, me di cuenta que me podía volver “adicta” y como persona consciente que era en esas épocas pretéritas, seguramente apagué el computador y me fui de rumba o a clase o hacer algo “más civilizado”.
[youtube http://youtu.be/bS0hWuqQHIk nolink]
El juego permite escoger la civilización, entre 18 que incluyen civilizaciones modernas y antiguas y medievales. El jugador debe lograr que la “civilización” pase de la pre historia, a momentos de auge político y financiero y por supuesto a guerras. Con lo bueno y lo malo que esto trae consigo. Es un juego de estrategia a la mejor manera de un consejo de ministros, una junta directiva o un grupo de amigos y amigas empezando un negocio nuevo.
Me atrevo a afirmar que este juego cubre casi todo lo relacionado con las ciencias sociales como el arte (y el horror ) de la guerra, la administración de la abundancia (escasez) de alimentos y el intricado mundo de las relaciones internacionales. Promueve las habilidades de pensamiento crítico, la creatividad y la innovación. También requiere “curar” contenido hay que saber algo de historia, economía y política para que la civilización sobreviva (eso a pesar de si misma, como cualquier lector de noticias sabe) y se puede jugar con otros.
Puede ser jugado por estudiantes mayores de 12 años y también como en el anterior se puede escoger el idioma entre inglés, francés, alemán, portugués y otros.
Estos dos juegos son parte del universo de juegos que existen el mercado, no tienen como objetivo enseñar pero definitivamente se aprende. Ahora bien hay otros juegos cuya intención si es enseñar algunas habilidades típicas de los currículos y debo decir desde ya que NO son tan espectaculares como los dos anteriores y que pueden ser usados en la clase como por ejemplo, los simuladores de vuelo de los pilotos civiles y militares o los juegos en TECH_cetera.
Me gustan estos juegos porque no fueron pensados con fines educativos “per sé” pero, claramente le sacan el jugo a lo que se aprende en el colegio y en la universidad y promueven habilidades que los ambientes tradicionales están lejos de tener en cuenta. También hay juegos desarrollados para aprender, que hacen que aprender sea menos “aburrido” no tienen ambientes tan sofisticados como universos imaginarios y reales, ni apelan a las inteligencias múltiples.
¿Pero cómo competirle a Civilization? El debate de los juegos interactivos apenas comienza y requiere de imaginación, conocimiento y de mucha innovación por parte de los maestros, de los padres y del sistema en general para que los juegos entren a la clase y se conviertan en herramientas educativas. Y Que conste que no se trata de cambiar el “picadito de fútbol” por la conquista del universo.
