Las nuevas tecnologías siempre están bajo ataque. Por años, si no décadas, hemos leído acerca de la posibilidad y no posibilidad de que las señales de los teléfonos celulares causen cancer. También están los problemas/ventajas sociales que causa nuestra obesión con los dispositivos digitales. La teoría que está de moda por estos días, dice que los dispositivos electrónicos nos están afectando el sueño.
De acuerdo con algunos expertos, los smartphones y tablets causan insomnio y disrupción de los ciclos naturales del sueño. La causa podría estar arraigada en nuestra “nueva” costumbre de llevar dispositivos electrónicos en vez de libros para leer antes de dormir. Los expertos dicen que los dispositivos emiten luz azul. La luz azul supuestamente engaña al cerebro y lo hace pensar que aún no es de noche, y por lo tanto tampoco hora de dormir. Así el cuerpo deja de producir melatonina y los ciclos de sueño se afectan.
No puedo decir con total certeza que los dispositivos electrónicos no afecten el sueño. Por el contrario, muchos estudios demuestran que existe una clara correlación entre la falta de sueño y los dispositivos electrónicos. Pero es muy probable que los dispositivos electrónicos sean solo uno mas, y no el principal, de los factores que afectan nuestro sueño.
Jerome Siegel y Gandhi Yetish de UCLA en Estados Unidos, publicaron recientemente un estudio con el cual demuestran que, en efecto, los dispsitivos electrónicos no son la mayor causa de los trastornos del sueño.
Su estudio comparó mas de 1,100 horas de datos del sueño de 100 millenials y 100 habitantes de sociedades preindustriales, tribus de Tanzania, el desierto de Kalahari y las selvas de Bolivia que nunca están expuestos a dispositivos electrónicos. La conclusión es que aquellos que nunca están expuestos, duermen en promedio 1 hora diaria menos (6.5 horas) que los millenials (7.5 horas).
Es decir que si bien los dispositivos electrónicos pueden afectar el sueño, su efecto muy posiblemente es menor al de otros factores críticos. Como quien dice preocúpese mas por estado de su colchón, por la temperatura de la habitación, o por la posibilidad de ser atacado por una fiera, que por llevar su smartphone a la cama.