Para nadie es un secreto que la idea de un ingreso garantizado para todos ha estado presente durante siglos, y su popularidad ha aumentado y así mismo, ha disminuido con el paso de los acontecimientos actuales. Aunque muchos todavía lo consideran un concepto radical, los defensores de un Ingreso o Renta Básica Universal (UBI) ya no lo ven únicamente como una solución a la pobreza, sino como la respuesta a algunas de las mayores amenazas que enfrentan los trabajadores modernos; la desigualdad salarial, la inseguridad laboral y de igual forma, la inminente posibilidad de pérdidas de empleo inducidas por la Inteligencia Artificial (IA). ¿Qué implica la Renta Básica Universal? a continuación, le comentamos todo al respecto.
Todo lo que tiene que conocer acerca de la Renta Básica Universal
Elon Musk, en la recientemente señaló que creía que “no es necesario ningún trabajo” debido al desarrollo de la Inteligencia Artificial, y que un trabajo puede ser para “satisfacción personal”.
Es de resaltar que, una política de renta básica universal en respuesta a la Inteligencia Artificial y la automatización abordaría el fracaso de los empleadores al momento de distribuir los beneficios del crecimiento económico (impulsado, al menos en parte, por la automatización) de manera justa entre los trabajadores, según comenta Widerquist.
Inclusive, algunos van más allá y señalan la RBU como un dividendo que se debe a los trabajadores por su papel en el desarrollo y la difusión del conocimiento usado para entrenar modelos de Inteligencia Artificial como ChatGPT de OpenAI.
Si en el futuro los trabajadores se quedan sin trabajo debido a la automatización y no tienen la capacidad de poder conseguir nuevos puestos, la RBU proporcionaría una opción igualmente prometedora. En un estudio llevado a cabo por Loek Groot y otros investigadores en los Países Bajos entre 2017 y 2019, se concedió una renta básica a personas desempleadas que antes recibían asistencia social. El estudio indicó que la participación en el mercado laboral aumentó. Cabe aclarar que, esto no se debió solamente al apoyo financiero proporcionado por la RBU, sino a la eliminación de las condiciones (y las sanciones por no cumplir dichas condiciones) que tradicionalmente se imponían a los solicitantes de empleo.
Algunos creen que el concepto de impuesto a los robots podría extenderse para aplicarse a la Inteligencia Artificial (IA) en formas más reconocibles (por ejemplo, grandes modelos de lenguaje como ChatGPT de OpenAI). Sugiere que las compañías que usan la IA para automatizar tareas, tomar decisiones o incluso, para prestar servicios podrían estar sujetas a impuestos sobre las ganancias o los ingresos generados a través de procesos impulsados por la Inteligencia Artificial. O bien, los gobiernos podrían gravar la recopilación, el procesamiento o la venta de datos de los que depende en gran medida la IA, y utilizar una parte de estos ingresos para aminorar el impacto de la tecnología en los trabajadores desplazados.
Siempre hay “peros”…
Aunque algunos sostienen que la Inteligencia Artificial podría impulsar a los trabajadores a la economía informal y que un ingreso básico universal podría ayudar a sacarlos de ella, Joe Chrisp, quien es investigador del proyecto Universal Income Beacon de la Universidad de Bath, ha señalado que una política de ese tipo corre el riesgo de facilitar la proliferación de este tipo de trabajos, en vez de incentivar a las personas a encontrar un trabajo más estable.
Y, sobre el tema de un posible modelo de RBU, nuevamente, se muestra escéptico, describiendo incluso las propuestas más modestas como probablemente requerirían grandes aumentos en los impuestos y, por lo tanto, como “difíciles de vender”.
Pese a estos desafíos, es importante recordar que la narrativa de la Inteligencia Artificial y la Automatización no tienen por qué ser una de humanidad versus máquinas. Al financiar la RBU mediante avances tecnológicos, se tiene la capacidad de poder crear crecimiento mutuo y prosperidad compartida pero, siempre actuando con precaución. Si bien la RBU financiada con tecnología es una perspectiva tentadora, su realización exitosa exige acción colectiva, así como también exige previsión, coraje, educación y mucha cultura, todo lo necesario como para poder imaginar un futuro más brillante y equitativo.