Primero fue el teléfono plegable que nos dejó con la boca abierta! Luego vino el Mate XT, el plegable con 3 pantallas de Huawei. Ahora, no contento con eso, Huawei lanza el Mate XTs, su segundo smartphone de este tipo que deja en claro algo: el fabricante no está dispuesto a quedarse atrás en la carrera por redefinir lo que significa un teléfono.
El Mate XTs: ¿teléfono, tablet o algo más?
El Mate XTs se despliega hasta alcanzar un poco más de 10 pulgadas, convirtiéndose casi en una mini tableta que cabe en el bolsillo. Su diseño con tres pliegues permite múltiples formas de uso: en modo compacto, extendido a media pantalla o completamente abierto. Una especie de navaja suiza a nivel de formatos de forma y de factores de uso.
El dispositivo incorpora un sistema de cámaras versátil (el arreglo principal de tres sensores que incluye un gran angular de 50 MP, un ultra gran angular de 40 MP, un telefoto de 12 MP y una cámara frontal o selfie de 8 MP), un procesador Kirin 9020 mejorado y una interfaz que se adapta dinámicamente al formato elegido. Es, sin lugar a dudas, una proeza de ingeniería que, muy seguramente, incluirá las lecciones aprendidas de su predecesor, el Mate XT Ultimate Design. Ahora bien, aunque aún no hay anuncio de la disponibilidad fuera de China, se estima que el precio de la versión base estará alrededor de 2,500 dólares (aproximadamente), lo que lo coloca fuera del alcance del usuario promedio.
¿Qué significa esto para la industria?
Con este lanzamiento, Huawei apunta a volver a posicionarse como el referente de innovación en el mundo de los plegable. Ya no se trata sólo de cámaras o rendimiento: la forma misma del dispositivo está en juego. ¿Será este el formato dominante del futuro? ¿O estamos ante un nuevo “teléfono con pantalla plegable” que impresiona, pero no se queda?
Esta apuesta también lanza un mensaje a Apple y Samsung: mientras ellos perfeccionan lo ya conocido, Huawei está dispuesto a arriesgarse aún más a lo desconocido.

¿Pero realmente lo necesitamos?
Aquí viene el punto provocador. La mayoría de usuarios usan el celular para lo de siempre: mensajear, ver redes, tomar fotos, pagar el almuerzo. ¿Realmente se necesita que el teléfono se abra en tres partes para eso? La mayoría no. Pero en el mundo de la tecnología, la necesidad no siempre es el motor de la innovación. Es la competencia. Es el estatus. Es el deseo de marcar la diferencia. Y ahí es donde Huawei juega fuerte: en mostrar que aún queda espacio para sorprender, para experimentar. Aunque eso implique fabricar algo que solo unos pocos van a comprar (muy exclusivo).
Así las cosas, el Huawei Mate XTs es impresionante, caro, complejo y tentador. Pero también es una señal de que el futuro de los dispositivos móviles no está escrito. ¿Será este el nuevo estándar o un lujo pasajero? Por ahora, es un recordatorio de que la industria tecnológica no sólo vive de mejorar lo útil, sino de provocar al consumidor.