Hace 12 años seguí,como buena parte de la mundo occidental, con horror e incredulidad los estragos que Katrina dejó a su paso por Nueva Orleans. Y no hace 10 días que Harvey destruyó buena parte de Houston. Acá en Miami, hace apenas unas semanas recordaba el paso del huracán Andrew hace 25 años. Este fue el último huracán que afectó seriamente la ciudad. Hoy estamos preparándonos para la llegada de Irma que viene feroz desde el Caribe. Debe tocar tierra en la madrugada del domingo. Pero acá, ni siquiera el “más tarde” típico de la cultura latina, ha evitado que nos hayamos empezado a preparar desde hoy.
En efecto, hoy era el día para prepararse porque el jueves y el viernes los colegios van a estar cerrados. Cuando eso sucede, se paraliza la ciudad. En general, a los gobiernos locales, los encargados de los colegios, no les gusta cerrar a menos que sea “obligatorio”. Cerrar los colegios implica entre otras, que en ciudades como Miami más de la mitad de la población escolar no tiene acceso a sus dos comidas diarias. Implica que muchos niños van a estar “por ahi” mientras sus padres trabajan o terminan sus labores.
Dicho sea esto, hice 25 minutos de cola en la estación de gasolina para llenar el tanque. Todas las demás cosas necesarias para prepararse para una tormenta de esa magnitud ya están listas. Si uno puede realmente estar listo para un evento como ese ese. Algunos analistas serios, científicos han dicho que es un huracán de magnitudes inesperadas. Ya veremos…
Mientras tanto WLRN, la emisora pública de la ciudad y The New Tropic, una plataforma de noticias local, ambos en inglés, se unieron para crear un mapa donde se muestran los lugares donde están los refugios y donde los ciudadanos pueden en un par de clicks agregar donde se consigue agua, gasolina y otros elementos claves como las baterías. Estas iniciativas de provisión de información casi que en tiempo real es una de las maravillas de la tecnología. Acá pueden ver el mapa.
Este tipo de propuestas de “data crowdsourcing en tiempo real” funcionan porque son fáciles de usar para cualquier ciudadano y porque la gente genuinamente siente que es su aporte a una potencial debacle. Hace unos años tuve el privilegio de escuchar a algunos de los desarrolladores de Waze, la plataforma por excelencia para el ciudadano de a pie. Y ellos explicaron como gracias a esas características, fácil uso y el afán de ayudar de los ciudadanos, después del huracán Sandy los servicios de salud y otros pudieron saber donde habían personas para rescatar, árboles caídos. Y también claro otros elementos básicos como gasolina y agua.
Ya veremos si este mapa se llena de lugares. Por ahora parece que tiene poca información. Lo revisaré, si puedo en los próximos días parar ir contándoles. Me hubiera encantado ver una plataforma como esta liderada por un grupo de medios que le permita tener acceso al otro porcentaje de la ciudad que no habla inglés, un poco más del 60%. Igual está es una propuesta generosa y maravillosa.
Por ahora, estaremos lo más seguros posible, esperando que Irma al ver esta ciudad tan maravillosa diga: Miami es más que mar y mall y decida convertirse en una tormenta tropical de esas que mojan pero no ahogan.