No hace mucho tiempo Sony era la marca más importante del planeta en el mercado de consumo. Sus productos: Televisores, VHS, DVDs, Walkmans (o será Walkmen?), CD Players y Consolas de Videojuegos fueron los referentes de la industria por mucho, mucho tiempo y todos sus competidores – incluso compañías como Apple – vieron en Sony la compañía a imitar en cuanto al diseño y calidad de sus productos, la compañía a seguir, la compañía a vencer (la gente de Gizmodo tiene esta excelente lista de productos de Sony hasta el 2009)
Como compañía, Sony tuvo un ecosistema como ninguno otro décadas antes de que cualquiera de sus competidores se diera cuenta de su importancia: Sony Electronics era (y sigue siendo) tan sólo una parte de un conglomerado que incluye a Sony Motion Pictures, Sony Music y Sony Financial Services, entre otros, y que ofrece desde componentes electrónicos hasta música y películas, pasando por soluciones médicas, computadores, televisores y productos de biotecnología.
Era el modelo ideal para una compañía que quería llevar a sus usuarios experiencias únicas y completas con la posibilidad de ofrecer contenido propio en dispositivos propios de la marca. Pero algo pasó.
Algo le quitó su “Mojo” y la relegó a posiciones secundarias
Algo le quitó su “Mojo” y la relegó a posiciones secundarias en la mente de la mayoría de los consumidores en mercados claves para la compañía y llevando a la compañía no sólo a perder market share sino a perder dinero.
Y aunque podría uno pensar que a Sony le pasó con Samsung y LG lo mismo que le pasó a Blackberry con Apple (es decir que no entendió que debía innovar e ignoró la competencia), la verdad es que que el gran problema de la compañía japonesa vino de un crecimiento desmedido de sus divisiones de negocio que terminó creando silos y líderes tan poderosos al interior de las diferentes divisiones de la compañía que más que un Sony hubo varios “Sonys”, cada uno creyendo que era más importante que el vecino de al lado, pensando sólo en sí mismo y extinguiendo desde su esquina del cuadrilátero el futuro de la compañía como un todo.
Hacia mediados de la década pasada y salvo el caso de hits esporádicos y muy focalizados como el PS3 la compañía se vio expuesta a un decrecimiento constante de sus ventas y a permanecer “en rojo” a nivel de utilidades, acumulando perdidas entre 2009 y 2012 de ¥855,925 Millones (algo así como USD 8,614 Millones) con los cuales borró literalmente todas las ganancias de la compañía en el siglo XXI.
Llegó el 2013 y recuerdo en Enero haber oído a Kazuo Hirai, el Presidente y CEO de Sony Corporation, decir – en el marco del CES en Las Vegas – que la compañía comenzaba el año con el firme propósito de volver a enamorar a sus clientes “un Wow a la vez”. Un promesa compleja de cumplir, más si miramos el contexto y los mercados en los que la compañía está compitiendo. “Una promesa más…” pensé en ese momento, pero hoy mirando hacia atrás estos 9 nueves veo que Hirai y todo su equipo no estaban haciendo una promesa, estaban dándonos un “sneak peak” de lo que podríamos esperar de una compañía que estaba empezando a ver los frutos de la sinergia de sus diferentes divisiones liderada por Hirai desde hace algunos años y que tenía ya en pipeline una lista de productos que cumplían con el sueño de su presidente.
El gran logro de Sony este año ha sido el de re-enamorar a la gente un “Wow” a la vez
El PS4 es claramente una muestra del esfuerzo de la compañía por innovar sin alienar a sus usuarios y por cumplir las promesas de delivery no sólo en los mercados tradicionalmente importantes como Estados Unidos sino a nivel Mundial. A diferencia del XBox One, el PS4 llegará a la mayoría de los países del planeta – incluido el grueso de América Latina – el próximo Noviembre y los más de 1.5 Millones de pre-órdenes que ha recibido la compañía parecen demostrar que el PS4 será otro hit para la compañía.
Pero el cambio no se queda ahí: si no han visto nuestro review de los nuevos lentes inteligentes CyberShot X10 y X100, los invito a que lo vean y se den cuenta de cómo pensar “fuera de la caja” se convirtió en “pensar sin la caja” en un dispositivo que genera ese añorado “Wow” en cualquiera que lo ve.
La tecnología 4K es claramente el camino que la compañía quiere seguir y los desarrollos de televisores, proyectores y videocámaras que ha hecho así lo demuestran.
Sin embargo el mejor ejemplo de que Sony ya no es la suma de sus compañías y divisiones sino una sola compañía y que la suma del todo es más grande que las partes que la componen es el nuevo Xperia Z1 – del cual tendremos nuestro review a fondo esta semana. El dispositivo per se es hermoso y súper funcional, resistente al agua y extremadamente rápido, pero lo que lo hace especial es la cantidad de tecnologías que la compañía está trayendo de otras divisiones (Fotografía, Video, Audio, Movimiento y demás) y está incorporando en el smartphone. Es algo que se llama Cross-Pollination y que permite utilizar los avances y desarrollos de una división (o de una región) en otra, generando mejores productos y soluciones para sus clientes y acortando los tiempos de desarrollo en general para la compañía. Personalmente creo, después de probar ambos dispositivos, que el Z1 es muy superior al Samsung Galaxy S4.
- La transformación de Sony se ve en sus tiendas – algunas ya remodeladas – que se están enfocando en mostrar las experiencias del usuario final y en fomentar el aprovechamiento del ecosistema Sony.
- Se ve en eventos como el SonyFest que poco tiene que envidiarle a los montajes que ha hecho la compañía para las grandes ferias mundiales como el CES o el IFA.
- Se ve en el uso de tecnologías como NFC, con las cuales la compañía terminará el año con el ecosistema más grande del planeta en materia de dispositivos que se conectan entre sí con un sólo toque.
- Se ve en la cara de los empleados de Sony y en el orgullo con el que hablan de su compañía, de sus líderes, de sus productos, de visión y de sus productos.
- Se ve en los discursos y presentaciones del señor Hirai.
- Se ve en los Estados Financieros, en donde la compañía volvió a dar utilidades.
- Pero sobretodo se ve en la cara de las personas que habiendo estado alejadas de la marca por unos años sólo pueden decir “Wow” cuando uno les muestra alguno de los nuevos productos de la compañía.
Sony recuperó su “Mojo”. Si no se ha dado cuenta, lo invito a que lo redescubra.