Decir que Skype es una de las aplicaciones más revolucionarias de la historia no es una exageración. Ustedes son muy jóvenes pero antes de la llegada de Skype uno tenía que pagar por llamadas de larga distancia!!
Un poco de historia
Skype, cuyo nombre se deriva de “Sky Peer-to-Peer”, fue fundada en el 2003 por parte de un grupo de desarrolladores de Estonia con una propuesta de valor clara, concisa y super interesante: reducir el costo de las llamadas de voz por medio de la utilización del protocolo P2P, el mismo que hizo famoso (y peligroso) a Kazaa y Napster por “fomentar” la piratería de música hacia finales del siglo pasado.
Devuélvase a ese momento de la historia, luego de que la burbuja de las .com explotara y dejara millones de kilómetros de cables submarinos ya construidos y decenas de miles de servidores de interconectados para ofrecer servicios de interconectividad. Un momento en el que internet ya se había masificado pero su uso era relativamente básico y nuestras interacciones eran vía texto y algunos emojis (que se llamaban emoticones, para ese entonces).
Y entonces apareció Skype y de la noche a la mañana podíamos llamar, por medio de nuestros computadores (!!!) a cualquier persona que estuviera conectada en cualquier parte del mundo.
El impacto fue tan notorio que eBay (el más grande retailer del mundo para la época) compró la compañía por $2500 millones de dólares en el 2005.
Con su ayuda, la pequeña compañía de estonia pasó del anonimato a tener una participación de 12% en el mercado de llamadas internacionales en el 2009. Skype se convirtió en un verbo y su aplicación fue la más 6ta descargada entre 2010 y 2019.
Sin embargo, el equipo de eBay se desenamoró de la tecnología y terminó vendiendo el 65% de la compañía ese mismo año a un consorcio conformado por Silver Lake, Andreessen Horowitz, y el Canada Pension Plan Investment Board por $1900 millones. La valoración del negocio fue de $2920 millones, tan solo un 16% más que lo pagado por ella 4 años antes.
Hacia finales del 2010, más de 600 millones de usuarios estaban registrados en la plataforma.
El Efecto Microsoft
El gran salto se dio en Mayo del 2011 cuando Microsoft, que había ya perdido la carrera de la revolución móvil contra Apple y Google, y que veía en el reciente lanzamiento de FaceTime por parte de Apple una amenaza existencial para su negocio, adquirió la compañía por $8500 millones de dólares.
La compañía rápidamente reemplazó Windows Live Messenger con Skype y comenzó a integrarlo con Windows y sus otros servicios. Gracias a esto, al lanzamiento de una aplicación para iOS y Android y la adición de videollamadas, Skype se convirtió en el líder absoluto en el mercado de llamadas de larga distancia a nivel mundial. De cada 10 llamadas internacionales hechas en el planeta en 2014, 4 se hicieron utilizando Skype.
Lamentablemente al convertirse en parte de una compañía mucho más grande, la aplicación perdió su foco y su encanto y comenzaron a aparecer competidores de nicho que hicieron que eso que lo hizo especial -poder llamar gratis a cualquier persona- se convirtiera en commodity poco valorado por los usuarios. Llamar gratis a otro país ya no tenía nada de especial; era un given. WhatsApp, GSuite, Webex y FaceTime, sumado a decenas de otros servicios se comieron su participación de mercado y de los 600 millones de usuarios que tenía en el 2010, al final de década quedaba sólo una sexta parte.
Del COVID y una pequeña compañía llamada Zoom
Y entonces llegó la pandemia del COVID y nos mandaron a todos para la casa. Y mientras Microsoft pensaba en como obligar a todos los empleados a usar Teams (del cual ahora Skype hacía parte) la gente se fue por lo básico y un nuevo líder fue coronado: Zoom, una compañía prácticamente desconocida a comienzos del siglo llegó a tener 49% del mercado de videollamadas en el 2021, mientras que la participación de Skype cayó a menos de 7% (es más, la de Skype + Teams fue de menos del 20%).
No se ustedes pero yo no uso Skype hace años. Es más hoy entré a revisar con quien me comunico a través de la plataforma y me di cuenta que solo la uso cuando me invitan de NTN24 y France 24 a alguna entrevista. De resto, uso FaceTime y Zoom para videollamadas, algunas veces con clientes uso Teams o Webex y, claro, está WhatsApp.
Adiós, Skype. Gracias por todo
Y así ha muerto Skype. O bueno, se ha anunciado su muerte para el próximo 5 de Mayo. Ese día el servicio dejará de funcionar y los pocos usuarios que aún lo utilizan tendrán que escoger una alternativa.
Microsoft, claramente, quiere esa alternativa sea Skype y ha preparado una forma relativamente sencilla de migrar.
Ver morir a Skype es ver morir a un grande. Y solo me queda por decir “Gracias, Skype. Gracias por todo”.