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TP-Link podría estar en problemas en EE.UU

Washington está investigando a TP-Link. ¡Todos los detalles aquí!

Recientemente se ha podido conocer que Washington está investigando a TP-Link, la marca de enrutadores de Internet para el hogar más popular en Estados Unidos, debido a sus vínculos con recientes ciberataques.

Según el Wall Street Journal, la empresa china posee hoy por hoy cerca del 65% del mercado de enrutadores para hogares y pequeñas empresas en Estados Unidos (frente al 20% en el año de 2019) y sus productos también son utilizados por el Departamento de Defensa y varias otras agencias federales, incluidas; la NASA y la DEA. Los informes señalan que 3 organismos gubernamentales (el Departamento de Comercio, así como el Departamento de Defensa y el Departamento de Justicia) han abierto investigaciones sobre TP-Link. La popular compañía TP-Link podría estar en problemas en EE.UU y en breve todos los detalles al respecto.

Washington está investigando a TP-Link

Es crucial señalar que el Departamento de Comercio ya ha enviado citaciones a la empresa. Además, algunas fuentes sugieren que la Casa Blanca podría prohibir la popular marca de enrutadores el próximo año, esencialmente cuando Donald Trump asuma el cargo en el mes de enero con sus agresivas políticas comerciales.

Los recientes ataques del tifón Salt Typhoon a varios proveedores de telecomunicaciones estadounidenses se dirigieron principalmente a los equipos de Cisco. Aun así, esta es una de las razones por las que la investigación contra TP-Link está cobrando impulso. Microsoft informó que un grupo de piratas informáticos chino usa una extensa red de enrutadores TP-Link comprometidos para lanzar ciberataques contra objetivos occidentales. Entre estos objetivos se incluyen entidades públicas y privadas, así como también centros de estudios y contratistas del Departamento de Defensa.

A inicios de este mes, la asesora adjunta de seguridad nacional, Anne Neuberger, comentó que el gobierno estaba “buscando tomar medidas para mitigar los riesgos para la cadena de suministro dentro del sector de las telecomunicaciones”.

Es de resaltar que esta investigación y así mismo, la posible prohibición de TP-Link recuerdan la medida que tomó la administración Trump en el año de 2019 contra Huawei, cuando no solo se le prohibió a la marca vender sus productos en Estados Unidos, sino que todo su hardware fue retirado de la infraestructura estadounidense. Incluso hoy, el gobierno continúa gastando miles de millones de dólares para reemplazar los equipos antiguos de Huawei y ZTE que algunas empresas de telecomunicaciones estadounidenses todavía utilizan.

Por si no lo sabía, TP-Link es una marca de routers muy popular en parte por sus precios bajos, que frecuentemente son más bajos que los de competidores como lo son; D-Link y Netgear en más de un 50%. Muchos proveedores de servicios de Internet también proporcionan a los nuevos suscriptores routers TP-Link como estándar. Dado que la mayoría de los usuarios ya están satisfechos con el router incluido, a menudo lo utilizan hasta que se rompe o cambian de proveedor. Sin embargo, la empresa no se ha quedado de brazos cruzados ante estas acusaciones.

Un portavoz de la empresa expresó: “Agradecemos cualquier oportunidad de colaborar con el gobierno de los EE. UU. para demostrar que nuestras prácticas de seguridad están totalmente en línea con los estándares de seguridad de la industria y para demostrar nuestro compromiso continuo con el mercado estadounidense, los consumidores estadounidenses y la solución de los riesgos de seguridad nacional de los EE. UU”.

TP-Link incluso ha trasladado su sede a los Estados Unidos para alejar a la empresa de China. A pesar de que la compañía se ha alejado de sus raíces chinas, la Embajada de China en Washington comentó que la investigación y la prohibición de la Casa Blanca tienen como objetivo “reprimir a las empresas chinas”, fundamentalmente porque TP-Link domina hoy por hoy el mercado de routers domésticos.

Lo cierto es que, por el momento, el gobierno de Estados Unidos no ha publicado ninguna prueba de que TP-Link haya permitido deliberadamente que sus productos se utilizaran para ciberataques patrocinados por el Estado chino. Pero, si procede a prohibir esta popular marca, cuantiosos fabricantes de routers estadounidenses están dispuestos a aprovechar el vacío que dejará.

 

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