La comisión señala que tener una directiva para toda la Unión Europea que aborde concretamente esos actos particulares ayudará a las víctimas en los Estados miembros que aún no los han criminalizado.
El texto de la enmienda exige a los proveedores de modelos fundamentales, a aplicar controles de seguridad, así como medidas de gobernanza de datos y además, mitigaciones de riesgos antes de colocar sus modelos en el mercado.