En los tiempos de los abuelos se decía que todos los niños “nacían con el pan debajo del brazo”, indicando que la nueva criatura traía un par de manos más para trabajar y llevar dinero a la casa a los pocos años de su nacimiento.
Con el pasar del tiempo, las nuevas generaciones han empezado a cambiar el paradigma y, ahora, en un mundo más conectado, muchos se preguntan:
- Es posible que ¿en lugar de un pan, la criatura traiga un SmartPhone bajo el brazo?
- Será que ¿la tecnología va a traer nuevos paradigmas en nuestras vidas?
- Más aún, ¿Qué PROS y CONTRAS hay en la llegada del celular móvil a nuestras vidas?
De la misma forma como la tecnología tiende a acercar a las personas que están lejos, si no se usa de manera correcta, también ¿Podría llegar a alejar a las personas que están cerca?
En el ámbito de trabajo, el dispositivo móvil puede ser muy benéfico, pues ayuda a comunicarse con otros miembros del equipo de manera inmediata cuando se presenta algún inconveniente, en el momento de un retraso a la hora de llegada o entrega de un proyecto pero, puede llegar a ser el distractor! Ya que la familia, amigos y conocidos también, tienen la capacidad de informar fácilmente cualquier novedad, chisme, cadena sin fundamente y/o “spam”. Por lo mismo, hay que elegir sabiamente los tiempos para revisar y contestar un llamada o mensaje, de lo contrario, es muy factible perder la concentración en diferentes momentos cruciales del día laboral.
Debido a lo anterior, debe existir una especie de código de ética a nivel del uso del SmartPhone en la oficina, para no terminar usándolo todo el tiempo, descuidando hasta el trabajo mismo que, en resumidas cuentas, es la razón principal para ir día a día a la oficina.
Ahora bien, más allá del campo laboral, al enviar excesivas comunicaciones sin importancia alguna para el receptor de las mismas, se puede llegar a saturar y terminar por cansar a los seres queridos, colaboradores, colegas y amigos! Situación que, en la mayoría de los casos, tiende a generar no sólo el repudio social sino los escenarios donde el emisor de la comunicación termina bloqueado e incomunicado por completo.
